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Mira

23, agosto 2020 - 21:34

┃ Rubén Beristáin

Cruz Azul

Foto: Mexsport

El Guard1anes 2020 tiene nuevo líder en solitario. La Máquina volvió a pitar en el torneo, ahora en patio ajeno, y la revancha se consumó ante el Atlético de San Luis.

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Cruz Azul volvió a su lugar favorito en el año, gracias a la contundencia de Jonathan Rodríguez, a un excelso Jesús Corona, que sólo pudo ser vencido en una ocasión y a las cuantiosas fallas de los potosinos, quienes fallaron dos penaltis. 1-3 final.

Los locales no especularon y arrancaron con un gran soporte defensivo, con línea de cinco y con la baja sensible del lateral Matías Catalán por suspensión, además de la de Ventura Alvarado, que estuvo considerado de inicio, pero en el calentamiento se resintió de una lesión muscular. Los encargados de suplirlos fueron el ecuatoriano Fernando León y Jorge Sánchez.

La visita sorprendió. El técnico Robert Dante Siboldi mandó a Julio César Domínguez y a Roberto Alvarado de titulares, a pesar de que el Cata estuvo tres semanas ausente por el cuadro de neumonía que sufrió y el Piojo apenas cumplió con su segunda titularidad en el torneo, después de haber sido enviado a la categoría Sub-20 debido a su baja de juego.

Los cementeros arrancaron con el pleno conocimiento de la victoria de los Diablos Rojos en Toluca, lo que los motivó para conseguir un triunfo de visita, que los posicionaría en el liderato.

Si bien San Luis dio los primeros avisos, fue Cruz Azul el que se adelantó en el marcador con polémica incluida.

En una jugada a balón parado, y debido a un juego peligroso de Ramiro González sobre Catita, el árbitro tuvo que recurrir al VAR. El silbante Óscar Mejía revisó la jugada en las pantallas, corrió al área y sin dudarlo marcó la pena máxima.

Jonathan Rodríguez tomó el balón y nadie se lo quitó. El delantero uruguayo cobró de forma impecable el penalti y marcó su anotación número 50 en el futbol mexicano.

Los potosinos despertaron y buscaron el empate de inmediato. Instantes después, Jesús Corona derribó a Mauro Quiroga y el árbitro apuntó al tiro de castigo desde los once pasos. Ibáñez se perfiló, pero avisó demasiado su disparo. Chuy, con toda esa experiencia que lo caracteriza a sus 39 años, adivinó la colocación y evitó la igualdad del rival.

El gol 51 de Rodríguez llegó después. Un centro preciso al área de Luis Romo terminó en la cabecita del atacante y con un brinco exacto envió el balón al hueco, donde el portero Felipe Rodríguez no pudo llegar. El 52 estuvo cerca, pero el charrúa se perdió la oportunidad cuando realizó una jugada de más. Su lamento y falla la pagó muy caro.

Los capitalinos pasaron del posible 0-3 al 1-2 en cuestión de segundos. El cumpleañero Nicolás Ibáñez se reivindicó y con una definición de auténtico matón, y con la complicidad de Cata e Igor Lichnovsky, acercó a su equipo antes de la finalización del primer tiempo.

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En el complemento las fallas frente al marco fueron una constante. Jonathan Rodríguez se perdió en dos ocasiones su hat-trick y los visitantes no liquidaron. Pero San Luis tampoco hizo mucho. Mauro Quiroga no pudo y Anderson Julio, quien entró como revulsivo, tampoco.

En el último instante, Santiago Giménez marcó el último clavo en el ataúd potosino y la victoria de los cementeros se concretó.