Mazatlán finalmente arrebató puntos en patio ajeno. Un gol fortuito de Melissa Arredondo fue suficiente para el triunfo de las sinaloenses sobre Puebla, que las puso nuevamente en la pelea por un lugar entre las ocho primeras de la Liga MX Femenil. 0-1 final.

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Las enfranjadas se hunden y no reaccionan, suman seis partidos sin ganar y ya ni siquiera podrán ostentar su invicto en el estadio Cuauhtémoc, el cual destruyó este sábado al mediodía la ola morada.

Fue un duelo de necesitadas en la Angelópolis. Ambas escuadras entendieron que su objetivo era ganar o ganar, y es que no había más opciones para ellas en su afán de salir de las últimas posiciones del torneo.

Puebla comenzó mejor, con un claro dominio y diversas opciones al ataque.
Las enfranjadas fueron las dueñas y quisieron aprovecharse de la defensa más goleada y endeble. Fue así como la zaga morada fue asfixiada por los embates de la experimentada Teresa Worbis, la frescura y velocidad de Marian Castro, además de los constantes desbordes de las laterales Ivonne Najar y Alexandra Godínez.

La más clara la tuvo Worbis. Con sus casi 37 años de edad y toda esa jerarquía que la caracteriza, inquietó a la portera Mariana Zárraga, pero la de Sinaloa siempre se mantuvo atenta y detuvo todo con buenas atajadas.

Después de tantas opciones, las locales se desesperaron y las bucaneras le pusieron personalidad a domicilio. Los primeros avisos fueron de larga distancia, Mazatlán se mostró con mejor ánimo y muchas ganas de abrir el marcador. Magaly Cortés y la capitana Casandra Montero sorprendieron con disparos lejanos, pero la portera Brissa Rangel únicamente los vio pasar.

La tercera para el equipo mazatleco fue la vencida. Melissa Arredondo se encontró el esférico y sin dudarlo disparó con destino a portería, la zaga poblana se atravesó en la trayectoria, pero sólo la desvió al fondo de las redes. Con sus mejores momentos del torneo, la visita se fue al frente y rompió con una racha de 331 minutos sin marcar fuera del Kraken.

El complemento no mostró cambios. Las cañoneras buscaron con ansiedad el segundo tanto, el que daría seguridad para una nueva victoria en su corta historia en la Liga. Liliana Hernández tuvo la oportunidad, supo romper el fuera de juego y quedó mano a mano con la portera enfranjada, pero la atacante cerró su ángulo y su disparo no preocupó a Rangel. Puebla se salvó y reaccionó. Najar tuvo la oportunidad de igualar el electrónico, cuando ya se cantaba la celebración, su disparo careció de dirección y salió por un costado. No hubo más. Mazatlán volvió a ganar e inesperadamente se puso en la pelea por un puesto en la fiesta grande.

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