Tras una primera mitad para el olvido, los Santos se recuperaron y con un poco de suerte obtuvieron su tercer triunfo de la temporada.

La defensiva local aguantó en el tiempo extra para que Nueva Orleans derrotara 30-27 a unos Cargadores de Los Ángeles que desaprovecharon la oportunidad de llevarse el triunfo del Mercedes-Benz Superdome. El pateador Michal Badgley falló un intento de 50 yardas en la última jugada del tiempo regular y en el agregado Justin Herbert terminó pagando derecho de piso.

Drew Brees tuvo un partido de contrastes, donde completó 33 de sus 47 lanzamientos para 325 yardas, con un pase de touchdowns y una intercepción. Los Santos se pusieron con marca de 3-2, alcanzando a Tampa Bay en la cima de la división Sur de la Conferencia Nacional.

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EL JUEGO
Atrás quedó la época en que Nueva Orleans se podía medir en tiroteo aéreo, con esta versión de Drew Brees les resulta imposible mover las cadenas de forma constante.

El histórico pasador de 41 años ya no tiene el brazo de antaño y esta situación fue aprovechada por los frontales angelinos que le pusieron presión durante toda la noche. Al menos durante la primera mitad el plan le funcionó a Anthony Lynn.

Lució mejor el novato Justin Herbert en su primer ‘Monday Night’, aprovechándose de la endeble secundaria de los Santos y encontró la zona prometida en tres oportunidades durante los dos primeros cuartos, tomando ventaja de 10 puntos en el descanso.

Brees estaba fuera de ritmo, inclusive le regresaron una intercepción a una yarda de la zona prometida, y tomaba fuerza la posibilidad de ser sustituido por Jameis Winston, pero el veterano reaccionó. Y lo hizo de la mano de Alvin Kamara y Emmanuel Sanders. Logró empatar la contienda con menos de un minuto por jugar, pero Herbert iba a montar una última serie en el tiempo regular donde, tras una gran recepción de Mike Williams, puso el ovoide en zona de gol de campo.

Dak Prescott fue operado con éxito

Con el tiempo llegando a su fin, Michal Bagdley estrelló el balón en el poste y le dio vida a unos Santos que parecían muertos. El juego se fue a tiempo extra y ahí sí apareció la versión conocida de Drew Brees. Comandó la serie ganadora para el gol de campo del triunfo cortesía de Wil Lutz, y después la defensiva se encargó de asegurar el triunfo.

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