En mesas de análisis, tanto expertos como ex futbolistas no logran comprender en dónde se encuentra el buen desempeño de Pumas, porque hay momentos en los que el equipo parece desordenado en busca del gol del gane o el empate. A diferencia de otros estrategas que priorizan el orden defensivo antes de ir a buscar el resultado, Andrés Lillini lo hace a su manera. Para el técnico de los Pumas es sencillo, su plantel jamás se echará para atrás y priorizará siempre atacar por encima de defender. Aunque tiene claro que dejan muchas ventajas atrás, no concibe el futbol de otra manera. El argentino no cambiará, mantendrá su idea de jugar con un contención natural, como Erik Lira o Andrés Iniestra, pero sólo en cuestiones específicas podrían jugar juntos.

“A veces sí nos descompensamos, más cuando los laterales van al ataque. no me gusta poner dos contenciones en la misma mitad de la cancha con características similares. Me gusta poner un contención fijo, ya sea Erik Lira o Andrés Iniestra, junto a un volante que lleve el balón a los delanteros, porque, si no, el equipo se parte con la parte alta. Si ponemos dos volantes de contención fijos, faltaría esa asociación con los delanteros. Por eso hago esto. Defensivamente compensamos con Lira frente a los centrales, para que no jueguen mano a mano. Un lateral siempre se debe de quedar, por lo tanto hay cuatro hombres a la hora de defender. A veces tenemos descompensaciones en el medio por buscar ganar. Es mi estilo y me gusta que el equipo se sienta. Debemos ser valientes”, explicó el estratega.

Otra de las cuestiones que padeció el equipo en las últimas fechas es la falta de profundidad por las bandas. Ante la suplencia de Juan Iturbe y Carlos Gutiérrez, fueron Favio álvarez, Facundo Waller y Juan Vigon los encargados de jugar por fuera en Pumas. Perdieron en ir a la línea de fondo, pero ganaron en tenencia del balón y mayor control del partido, algo que les hacía falta, en palabras de Lillini.

“Puede ser que perdimos profundidad. Traté de jugar a Favio por fuera para ganar el juego, sabiendo que Mozo tendría esa profundidad. No es la misma que tenemos cuando juegan Carlos Gutiérrez o Iturbe. Lo dejé claro, iba a jugar el que mejor estaba. Todos pasan por diversos momentos en un semestre. Perdimos profundidad, pero ganamos en juego. Necesitábamos crecer en eso. Quizá perdimos un poco de profundidad”, compartió.

Aunque suena descabellado ante equipos con una nómina que, ante el mínimo error, no te perdonan, Andrés Lillini no cambiará. Así creció y así pensó toda su vida, además de que árbol que nace torcido, jamás su rama endereza.
“No hay forma de que sea distinto. Vivo así, me crié así y vivo el futbol así. En fuerzas básicas los equipos son iguales. No me voy a traicionar para meterme atrás y defender un resultado. Sería una incongruencia de mi parte. Vamos a tratar de defender mejor, pero la presión alta se mantendrá”, remató.

PARÓN SÍ AFECTARÁ

Entre la Fecha FIFA y los días del repechaje, los cuatro primeros clasificados a los cuartos de final pararán por 17 y 18 días, siendo el último el caso de Pumas. Andrés Lillini, timonel auriazul, aceptó que es demasiado tiempo y que sí les afectará, aunque tratarán de que el daño por la falta de actividad no sea tan notorio.

“Son muchos días que tenemos que manejar con criterio. No podemos entrenar y entrenar durante 17 días, porque tenemos que llegar bien al 26 de noviembre. Debemos dosificar las cargas. Entrenamos estos días y ya veremos con el pasar de la semana cuando nos concentramos para atacar de mejor forma este primer partido”, admitió.

Sin embargo, no todo es malo. A los auriazules les servirá para recuperar a tipos como Andrés Iniestra y Luis Fernando Quintana, quienes en próximos días se incorporarán de lleno al trabajo con el grupo.

“Hoy sí nos perjudica, porque venimos con ritmo de competencia. Sirve para recuperar lesionados y para darle pausa a los que vienen con alguna sobrecarga, también para liberar presiones y encontrar un estado de paz”, dijo.

La famosa ‘burbuja’ en la que se adentrarán conforme se acerque su partido de los cuartos de final, sigue en pie. Los felinos utilizarán su hotel de confianza al sur de la Ciudad de México para evitar contagios de Covid-19. Incluso, no tienen partidos programados por la misma situación.

“No tenemos amistosos programados, por ahora. Es complicado buscar equipos para jugar, porque los que no compiten se van de vacaciones. Y en la Liga de Expansión no paran, tampoco podemos jugar contra ellos. Estamos analizando en qué fecha nos vamos a meter al hotel, apenas unos días antes del primer partido”, confesó.

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