1, febrero 2015 - 19:30
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Por Gildardo Figueroa/Enviado Especial
GLENDALE, Arizona, 1 de febrero de 2015.- Fácilmente en una proporción de 4 a 1 se podían apreciar los aficionados de los Halcones Marinos de Seattle sobre los Patriotas de Nueva Inglaterra.
Había los que traían el rostro pintado con los colores verde y azul, otros totalmente disfrazados, algunos solamente con sus jerseys, mientras tanto había muchos otros que ostentaban el jersey No. 80, que portara durante muchos años el máximo exponente de esta franquicia, Steve Largent.
El día amaneció con una neblina muy densa y se sentía el frío en todo el valle de Phoenix. Muy temprano, el Estadio de la Universidad de Phoenix no se podía apreciar en millas a la redonda, pero al abrirse las puertas del estadio alrededor de las 12 del día, como por arte de magia las nubes se esfumaron y salió el sol.
Bajo los rayos intensos y un calor que comenzó a azotar alrededor del inmueble gracias a la humedad que había después de cuatro días seguidos de lluvias de todo tipo en Phoenix, la gente comenzó a mostrarse en las inmediaciones del estadio.
Andrés y Carlos viajaron desde la ciudad de México para apoyar a sus “Patriots”. Me platicaron que el boleto que tiene impreso un valor de 1,500 dólares les costó 2,000.
Y así pudimos observar gran cantidad de aficionados desfilar alrededor de este estadio que aparece de la nada y parece un platillo volador que aterrizó en el desierto.