11, diciembre 2020 - 0:17
Andrés Lillini
Después del empate entre los Pumas y el León en la ida de la Gran Final del Guard1anes 2020 , pese al buen partido de los Universitarios, para Andrés Lillini, técnico auriazul, el gol que recibieron en la única llegada de los esmeraldas en el complemento fue demasiado castigo, sobre todo por el desgaste que tuvieron en la cancha de CU.
“Sabor amargo, porque pudimos haber sostenido el gol de diferencia. Cuando nos equivocamos ante un rival como este, nos hacen el gol, como sucedió. El minuto 89 es lo mismo que el dos. El sabor es amargo, pero es un equipo que se caracteriza por no darse por vencido. Vamos a ir allá para ganar”, dijo.
El estratega argentino hizo énfasis en que se tendrán que reponer rápido de lo que corrieron y apretaron a su rival en el primer capítulo de la Final. Reconoció que en el juego de vuelta tendrán que repetir la dosis si quieren mantener sus aspiraciones vivas.
“El primer tiempo tuvimos muchos errores. La única llegada a la portería de Pumas fue el gol. Un partido cerrado donde tuvimos algunas acciones. El empate no es bueno para nosotros, por lo que hicimos y por el desgaste. Sucedieron algunas lesiones, como la de Leo e Iturbe; Carlos me dijo que estaba mareado. Ojalá lo podamos recuperar. Debemos jugar la última final y ganarla”, comentó.
Lillini aseguró que no irán a la cancha de los esmeraldas a especular o encerrarse. Advirtió que saldrán con la misma propuesta e intensidad que el juego de ida, lo que ya les funcionó ante Cruz Azul y lo que hasta el minuto 89 les había dado resultados ante la Fiera.
“Similar, porque las propuestas son de los dos. Favio, Waller y Talavera los vamos a probar mañana, sobre todo con las bajas. Si llegan, van a llegar con lo justo. Teneos que evaluar bien para jugar los 90 minutos que restan. Todos deben estar al cien”, lanzó.
El timonel universitario explicó el porqué de la reiterada ausencia de Alfredo Talavera, quien, cuando más cerca parece estar, termina como baja de los partidos, al menos en esta Liguilla.
“No es una lesión simple. Lo que me comenta el doctor, es que es justo donde se inserta el aductor. Es una lesión complicada. Hizo futbol, pero en algunas situaciones aceptó que no estaba al cien. Tiene un margen de duda porque es una lesión que, en el tiempo que tiene de cicatrización, está justo en el límite”, culminó.
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