El surgimiento de futbolistas duales en la Liga Mx Femenil ha llegado a oídos de Jorge Campos, y con beneplácito aplaude a quienes se atreven a hacer lo que en su tiempo revolucionó el futbol mexicano al jugar él la doble posición: portero y delantero.

¿Quién no recuerda a Jorge Campos cuando, después de desempeñarse bajo los tres postes de Pumas, se apresuraba hacia una banda para desprenderse del colorido uniforme que le caracterizaba y convertirse en atacante?

Jorge Campos platicó con ESTO y habló sobre lo que significa ver que en el balompié nacional jugadoras de la Liga Mx Femenil empiezan a hacer historia, con valor y personalidad para ser porteras y jugadoras de campo sin importarles el qué dirán.

Sabe el ahora comentarista de TV Azteca que Ana Paola López Yrigoyen, de Pachuca, tuvo que ser habilitada de guardameta pese a estar registrada como mediocampista; esto ocurrió en la fecha 16 del Guard1anes 2020 ante Atlas, debido a problemas de salud de algunas jugadoras. Cabe mencionar que ella fue la primera jugadora dual; era portera cuando fue invitada a jugar en el equipo del Tecnológico de Monterrey Campus Puebla, pero se dio a conocer en Pumas.

Campos también se enteró que Paola Selvas Ríos debutó como delantera en Mazatlán, en duelo contra Pachuca en la jornada 12, pero que en sus inicios en el Puebla jugó sus primeros minutos en el profesionalismo como portera en el Apertura 2018; apenas fueron 2 minutos al suplir a Karla Morales, pero suficientes para dejar un precedente. Hoy, a sus 21 años, Paola Selvas ha revelado que desea emular a Jorge Campos, algo que aprueba con gusto el famoso Brody.

“Desde cuándo esperaba esto. Pienso que es algo increíble, algo maravilloso que tienen ellas, esas cualidades, y deben seguir aprovechándolas, pero lo más importante es que sigan su instinto, porque luego no te dejan y te dicen que escojas una posición, que juegues aquí, que juegues allá”, afirma Jorge Campos, quien para empezar aconseja a las duales jugadoras que se diviertan y que sigan disfrutando el ser futbolistas.

Al mismo tiempo les dice que en los entrenamientos traten de jugar ambas posiciones y, de ser posible, en un mismo partido, ya que les va a servir para mejorar en ellas, pero advierte que llegará el momento que tendrán que decidirse por la portería “porque ya no contarán con el mismo fuelle ni con las mismas condiciones para seguir corriendo como delanteras”, añadió.

Jorge Campos pasa por alto el hecho de que ambas jugadoras miden un poquito más de 1.60 metros y recuerda que en su época se hablaba de que él no era alto (1.70 m) y eso no fue impedimento para que apareciera en la estela de los grandes en su posición y hasta fue elegido el mejor tercer portero del mundo en 1994 por la Federación Internacional de Historia y Estadística de Futbol.

“La estatura no te da límites y ellas no deben pensar en nada; tienen que disfrutar su momento y deben jugar en donde ellas quieran, en donde ellas sientan y el técnico decidirá dónde las utiliza”, y sin dudarlo afirmó que quiere conocerlas algún día, platicar con ellas, “tomarnos un café”, cuando ellas quieran, “ahí en Azteca estoy”. Está abierto a encontrarse con Ana Paola y con Paola “para darles consejos, si quieren seguir mis pasos”.

Cuando le preguntamos a Jorge si el ser mujer podría impedirles a la tuza y a la mazatleca trascender en las dos posiciones, al margen de estar en un equipo, tal vez, sin los blasones de aquel Pumas de los años 90 que significó un gran respaldo en su carrera, respondió que no, “al contrario, les va a ayudar más por ser mujeres. Creo que van a tener mejores oportunidades y opciones para decidir, pero no les puede detener nada”.

El mundialista en Estados Unidos 1994, Francia 1998 y Corea-Japón 2002 les aconseja “que no las detenga ni su estatura ni su peso ni nada. Lo más importante es la mente para ellas. En este momento tienen que mentalizarse en entrenar las dos posiciones. En su tiempo libre tienen que entrenar la posición que no entrenaron en el día. Es mucho sacrificio nada más, pero vale la pena y más si disfruta jugando al futbol”.

¿Esperabas que se pudiera repetir una historia similar a la tuya en el futbol profesional, sobre todo en México y en categoría femenil?

“Siempre había estado esperando que alguien hiciera algo así, porque no nos pueden parar, no nos pueden detener. Debe haber muchas opciones para que todos jueguen, para que todos disfruten. Los defensas, los medios y los delanteros juegan las posiciones que quieren y los porteros también pueden hacerlo, aunque el problema es que los porteros en su mayoría son altos y los altos no son rápidos”.

¿Paola, la de Mazatlán, tiene que hablar con el entrenador para pedir también ser portera?

“Tiene que confiar en ella misma, no que hable con nadie. Que demuestre en la cancha, en la portería, en la delantera, en todos lados, que corra y corra y que disfrute. El mismo consejo es también para futbolistas hombres; todos pueden. Que nada los detenga.

“Sí se puede jugar varias posiciones. Si yo lo hice. No le debe detener nada. Ella ya lo hizo (en Puebla). Así me pasó a mí. Debuté de portero, estuve en la banca de portero y después me fui de delantero y tuve más oportunidades de jugar de delantero”.

¿Cómo le hiciste, hablaste con el DT para que te diera chance?

“Entrené mucho, entrené mucho, entrené mucho. Me preparé para que me diera la oportunidad de jugar de delantero. Era difícil porque no creían tanto en lo que yo estaba haciendo. Era difícil que creyeran que yo jugaba en el equipo de mi “papá” de delantero y de portero, pero todos saben que mi “papá” Miguel Mejía Barón confió mucho en mí. Él se la jugó conmigo. Recuerdo que lo criticaron porque me puso, luego lo criticaron porque me regresó a la portería. ‘¿Quién los entiende?’, le decía yo a Miguel. Y al mejor delantero de Pumas lo regresaron a la portería”.

¿Tú le pediste a Mejía Barón que te pusiera también de delantero?

“Yo busqué esa oportunidad y le pedí la oportunidad de entrenar de delantero y también de jugar. No lo tomó a broma porque me veía jugar en los entrenamientos y en Acapulco”.

Campos salió campeón de goleo en la Concacaf; hizo 24 goles en un año con todo y Liga, Concacaf y Copa México.

PAOLA SELVAS: PASIÓN Y PERSEVERANCIA

POR IVONNE ALMARAZ

Contadas son las futbolistas que pueden presumir el talento y la capacidad para jugar en diferentes posiciones, y Paola Selvas es una de ellas. Desde muy pequeña, la dorsal número 27 del Mazatlán FC Femenil encontró su vocación. Al lado de un balón y con Jorge Campos como inspiración, logró desempeñarse en la portería así como en el ataque: “Desde que tengo memoria me ha gustado mucho el futbol y mi papá (Enrique Selvas) llegó a jugar, pero no fue de los que me inculcaron este deporte. Él siempre me regalaba muñecas, hasta que un día le dije que yo quería jugar futbol, y fue ahí que a los cinco años me metió a una escuela de Pumas”, contó Paola al Diario de los Deportistas.

“Antes no existía esa posibilidad de jugar con mujeres, así que en el equipo que estaba de puros hombres, jugaba medio tiempo de portera y medio tiempo de delantera y conforme pasaron los años me hablaban mucho de Jorge Campos; entonces lo investigué y cuando descubrí la gran figura que era, no lo pensé y lo tomé como ejemplo. Me dije: si él puede jugar en ambas posiciones, yo también”, relató con emoción.

A los 13 años se unió al representativo de la UNAM, donde por primera vez pudo formar parte de un equipo femenil en el cual su consigna era la portería: “Fue muy emocionante ser parte de eso, porque yo nunca había jugado con mujeres y al llegar ahí todo estuvo muy padre, además el futbol ya era a un nivel casi profesional porque competíamos en nacionales y regionales. Cuando llegué ahí, mi posición se quedó como guardameta y estuve un largo tiempo jugando así, hasta que salió la noticia de que por fin habría una Liga Femenil de manera profesional”, mencionó.

Selvas persiguió su sueño para jugar a nivel profesional y aunque la mayoría apostaba por ella en la portería, otros le abrieron la puerta para probarse al frente: “Sale la noticia y me voy a hacer visorías a Pumas, por fortuna logro quedarme y juego con ellas el torneo previo que fue la Copa, pero después me cayó el veinte y le dije a mi papá que ya no quería jugar como portera, que al ver a mis compañeras al frente yo también quería estar ahí en la pelea por el gol, así que me salgo y quedo fuera un tiempo”, recordó.

“Después, cuando Puebla se une a Liga, no lo pienso dos veces y me voy a probar y de nuevo me quedo como arquera, pero no lo dejé así y fui a tocar puerta a Gallos de Querétaro, donde sorpresivamente me dijeron: ‘sí, acá te queremos como atacante’”, comentó a ESTO.

Con los múltiples cambios en Querétaro, Selvas buscó otros horizontes y llegó a la Perla del Pacífico, donde no pierde la ilusión de seguir en ascenso: “Este torneo (Guard1anes 2020), la verdad, fue muy atípico, yo mandé mi CV a ciegas por la pandemia y ya después me llamaron para decirme que sí viniera a Mazatlán, y aquí estoy, con esta emoción de poder aprender más y aportar en todo lo que pueda al equipo”, cerró.

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