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4, abril 2021 - 14:11

┃ Yael Rueda

dinenno

 

 Pumas parecía muerto cuando los 90 minutos del partido llegaron en el cronómetro. No lo estaba. El domingo en Ciudad Universitaria fue de resurrección para los felinos que rescataron el empate en los últimos tres minutos del partido ante Pachuca.

Ismael Sosa hizo válida la ley del ex para abrir el marcador, Erick Sánchez dio el segundo golpe a los Pumas, pero en el ocaso del juego aparecieron Sebastián Saucedo y Juan Ignacio Dinenno para entregar un punto a la causa felina, 2-2 final.

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Mucha garra, pero el resultado sirvió de poco. Universidad Nacional sigue fuera de la zona de repechaje y siguen sin depender de ellos mismos para definir su futuro. Le quedan cuatro “finales” a Andrés Lillini, la meta sigue visible.

Pumas entendió este partido como la primera de sus cinco finales. El equipo de Andrés Lillini salió al terreno de juego con toda la emoción y la pasión para ingresar al repechaje.

Universidad Nacional tuvo la pelota, aunque no la creatividad para meterla en la portería que defendió Óscar Ustari.

La primera fue de Erik Lira. La pelota cortada en el área quedó a modo, cerquita de los botines del contención y él no dudó un momento, prendió la esférica a bocajarro. En el arco no hubo mayor problema, Ustari recostó bien hacia su izquierda y se quedó con la redonda.

Pumas trató de ser un auténtico vendaval, especialmente por las bandas, donde encontraron el espacio para acercarse hacia el marco hidalguense.

Alan Mozo llegó a la línea de fondo, puso el centro hacia la olla y Juan Dinenno la controló de espaldas a la portería. Hacia la izquierda, Favio Álvarez entraba completamente solo, pero el 9 auriazul decidió acomodarse para dar media vuelta y prenderla de derecha.

El balón terminó fuera de la cancha y los reclamos por parte del “Mago” no se hicieron esperar, no era para menos, el volante no tenía marcador y habría quedado completamente listo para fusilar.

A pesar de todo, Pumas no se rindió en la búsqueda del gol. Alan Mozo fue incisivo, se mostró inspirado. Cambio de juego del lateral, en la banda contraria recibió su amigo Juan Pablo Vigón, mató el balón y lo tocó para Facundo Waller. El volante la prendió con dirección a portería, mas un imponente salto de Ustari evitó la caída de su marco y mandó a tiro de esquina.

Cuando Universidad Nacional era mejor, la ley del ex se hizo presente en el Olímpico. Por la banda izquierda Erick Aguirre atrajo la atención de dos defensores y en el momento preciso tocó el balón hacia el centro. Ismael Sosa lo dejó entrar ante el acoso de Johan Vásquez y cayéndose sacó un fogonazo que se incrustó en el ángulo. ¡Golazo de Pachuca en su primera llegada de peligro!

En el complemento, Pumas salió otra vez con todas las ganas del mundo para igualar el marcador. Juan Ignacio Dinenno tocó en profundidad para Alan Mozo, el lateral ingresaba al área en diagonal y Miguel Herrera lo trastabilló. El defensivo felino salió disparado y dio varios giros en el césped. El silbante sacó la roja de manera directa. Los reclamos llegaron, nadie podía creer que una acción tan básica y que no era manifiesta de gol significara una expulsión.

El VAR ayudó a corregir la decisión. Después de ir a la pantalla, el silbante canceló la tarjeta roja y amonestó a Herrera.

Facundo Waller cobró el tiro libre, el fogonazo llevaba intención, pero iba con mucha potencia y se fue por encima del travesaño.

El juego se trabó y se hizo más físico en el centro del terreno de juego. Cuando parecía que nada más pasaría, Pachuca volvió a tener una llegada de peligro y logró aumentar la ventaja.

Saque de banda desde la banda derecha, en el área, Roberto Nurse peinó el balón y Erick Aguirre remató. La pelota no picó de manera correcta y Alfredo Talavera atajó, aunque no logró controlarla, terminó por conceder rebote. Erick Sánchez, quien se encontraba solo en el área llegó a tiempo a la cita con el balón y puso el balón en las redes.

En el ocaso del partido los felinos encontraron la salvación. Centro desde la banda derecha, Juan Dinenno estuvo marcado por dos hombres en el área, esto lo aprovechó Sebastián Saucedo a segundo poste. El volante remató de cabeza y la mandó a guardar.

Instantes después, Juan Pablo Vigón recibió una patada en el área y se marcó la pena máxima. Dinenno tomó la pelota y encaró a Ustari que muchas cosas le dijo al oído, también le gritó que “¡A la izquierda!”. Dinenno le cumplió.
El 9 auriazul cobró fuerte hacia la izquierda, Ustari se tiró hacia el costado contrario y se finiquitó el empate en la cancha del Olímpico Universitario.

 

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