Foto: AFP

Sergio Pérez aún no se considera 100 por ciento cómodo sobre su monoplaza RB16B, por lo que dejó claro que en el Gran Premio de Emilia-Romaña buscará dar otro paso en el acoplamiento de su vehículo.

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“El objetivo es dar otro paso en términos de adaptación al coche. Todavía no estoy ahí. Así que, si soy capaz de adaptarme este fin de semana, en una pista de carreras muy diferente, con necesidades diferentes (a las de Bahréin), porque Imola tiene una gran cantidad de curvas de media velocidad en comparación con Bahréin, asfalto muy diferente. Este será un lugar único en comparación con Bahréin, así que eso solo puede ayudar”, expresó previo a la competencia que se desarrollará este fin de semana.

Si bien ‘Checo’ señaló hace un par de días que su meta es meterse en el podio del circuito italiano, recalcó que la carrera le ayudará principalmente a tomar experiencia en su Red Bull: “En general, se trata de entender cómo funciona el coche y tener confianza en él. En Bahréin di grandes pasos para entender el coche”.

Para haber sido su primera aventura con la escudería austríaca, el haber remontado 15 lugares en la pista asiática mandó un mensaje de lo que puede lograr el mexicano una vez que se adapte a su modelo. El autódromo Enzo e Dino Ferrari presentará un reto distinto.

“Sería muy fácil perderse y empezar a perseguir una dirección que no hace que el coche vaya más rápido, pero tenemos una muy buena referencia en Max (Verstappen), la forma en que está conduciendo el coche y lo que está persiguiendo; así que creo que es un área clave. Tenemos que tratar de no alejarnos demasiado y él tiene una línea base bastante buena en términos de cómo extraer el máximo del coche”, agregó.

El jalisciense tomará como ejemplo lo que hace su compañero de equipo: “Pienso que tenemos que estar en esa área de funcionamiento tanto como sea posible”.

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