Yael Rueda

Foto: Oswaldo Figueroa | ESTO

La faena debe liquidarse, pero Atlante logró dejar medio moribundo al Toro. Cuando parecía que los Azulgranas no tenían la capacidad de hacer daño y el Celaya carecía de bravura, un auténtico matador apareció en el área para entregar la ventaja en los cuartos de final.

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Ramiro Costa pasó de ser duda por una molestia a ser el hombre fuerte de la ofensiva atlantista. El argentino estuvo en el lugar y momento adecuado y marcó un doblete tras asistencias de Edson Partida y Ronaldo González, suficiente para sacar buen crédito de cara a la vuelta que se jugará el viernes en el Miguel Alemán, marcador final 2-0.

El partido se peleó con todo en la media cancha, pero las emociones simplemente tardaron de llegar al estadio Azulgrana. El Celaya dejó claro que no vino a la capital del país a recibir una faena y desde el primer momento se fueron con todo para embestir a los rivales.

Sergio Vergara, el hombre más peligroso de los astados tuvo una de las primeras opciones, recibió en el área y logró sacarse de encima a Humberto Hernández, aunque la definición no fue la más apropiada. A pesar de todo, el balón quedó a la deriva y otro jugador de los guanajuatenses remató, tampoco lo hizo con éxito. Tarde pero seguro, el árbitro sancionó fuera de juego de manera correcta, el chileno estaba adelantado desde el primer toque. Todo quedó solamente para la anécdota.

El Atlante apenas tuvo una insinuación de peligro. La pelota detenida siempre es una posibilidad para hacer daño, especialmente cuando Luis Arcadio García toma la esférica. El balón salió potente y pasó ´por el espacio que hicieron los jugadores de la barrera, pero todo quedó en un pequeño susto. Campestrini voló por precaución y la redonda se fue por un costado.

Celaya tuvo la de mayor peligro. El balón llegó desde la izquierda hacia el corazón del área. El Gansito se lanzó por aire para cortar y dejó a modo para Sergio Vergara, quien definió de primera intención y por mero reflejo, Humberto Hernández sacó la pelota con los pies, el balón fue hacia los cielos de nueva cuenta y el meta volvió a levantarse para evitar el remate del ofensivo astado. ¡Triple atajada espectacular!

En la recta final de la primera mitad, el juego comenzó a ensuciarse. Leobardo López fue amonestado por una dura entrada sobre Ramiro Costa, posteriormente, el argentino del Atlante también se fue con una advertencia.

Vladimir Moragrega y el Chino Venegas también metieron fuerte la pierna, aunque el goleador azulgrana salió sin amonestación de la patada que le metió a Sergio Vergara.

Para el complemento, Mario García movió sus piezas en la búsqueda de tener mayor generación ofensiva. Vladimir Moragrega y Edgar Alaffita salieron de la cancha y dejaron el lugar para Ronaldo González y Duilio Tejeda.

La realidad es que la tónica de la segunda mitad no cambió, el partido fue aguerrido, muy combativo, pero las oportunidades siguieron escaseando.

Cuando parecía que todo quedaría para definirse en la vuelta apareció la jugada grande del Atlante. Luis García jaló la marca por la banda izquierda, Edson Partida le hizo la pasada y mandó centro a la olla. Ramiro Costa apareció completamente solo e intentó definir de primera intención, abanicó, pero corrió con suerte. La redonda le quedó a modo y fusiló a Campestrini.

Apenas pasaron unos minutos cuando Costa volvió a aparecer. Ronaldo González metió pase filtrado y dejó listo al argentino en mano a mano. Como auténtico toro resistió los empujones de la defensa y definió con la parte externa del botín izquierdo para mecer las redes.

No hubo más en el partido, Atlante se quedó la ventaja y buscará finiquitar las acciones el viernes en la casa del Celaya.

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