Por Ivonne Almaraz

Foto: Especial

Con la final de la Liga MX Femenil a la vuelta de la esquina, varias de las jugadoras tienen los reflectores encima. Sin embargo, si existe una posición en la que los técnicos Édgar Mejía (Chivas) y Roberto Medina (Tigres) pueden estar tranquilos, es bajo los tres palos.

Blanca Félix de las tapatías  y Ofelia Solís por las norteñas no mantuvieron la titularidad en la fase regular como en otros torneos, pero son sinónimo de tranquilidad  en la portería

BLANCA FELIX

En la perla tapatía, Félix se dio a conocer, ya que desde el primer semestre se unió a las filas del Rebaño, aunque fue hasta la sexta fecha del Apertura 2017 que Luis Camacho le dio la oportunidad de mostrarse, siendo en el juego ante Santos, cuando hizo su debut.

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Desde entonces, la sinaloense hizo lo propio y poco a poco consiguió mostrarse al disputar ocho cotejos. En esa primera campaña, el Guadalajara acumuló 34 puntos, cifra que lo hizo acreedor a un boleto para la fiesta grande.

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Fue ahí que el nombre de Blanca comenzó a tomar fuerza gracias a sus atajadas y juegos aéreos en el primer Clásico Nacional Femenil. Ya para la final, la afición estaba identificaba con la futbolista, por lo que la derrota de 2-0 en la ida ante las Tuzas no fue factor para poner en duda su capacidad. Camacho recalcó su confianza en ella para la vuelta, donde respondió tras mantener el arco cero, lo que fue vital para que Chivas levantara el título.

Lo hecho en ese torneo deslumbró al cuerpo técnico y se convirtió en la portera titular del combinado tapatío y hoy por hoy, cuenta con un total de 118 cotejos, en donde 16 de ellos han sido en las Liguillas que ha participado el equipo. Sus características la tienen dentro de las mejores guardametas de la Liga, y pese a que cada torneo tiene mayor competencia interna, se encuentra disputando su quinta fiesta grande y segunda final.

OFELIA SOLÍS

En el norte, Ofelia Solís es la de jerarquía, pero su recorrido en Tigres no ha sido sencillo. La originaria de Coatzacoalcos, Veracruz,  reforzó al cuadro felino de cara a su debut en la Liga, aunque, estuvo a punto de portar el escudo de Rayadas. Cuando se dio el anuncio oficial sobre el nacimiento del futbol profesional en México, Solís fue invitada a hacer pruebas con Monterrey, equipo en el que jugó amistosos y con quien tuvo contrato sobre la mesa, pero su corazón estaba con Tigres lo que la hizo rechazar la oferta y tocar las puertas con las felinas para pedir una oportunidad. Fue así que luego de las visorias consiguió ser parte de las Amazonas, aunque su debut llegó hasta la octava fecha, cuando las entonces dirigidas por Osvaldo Batocletti le hicieron los honores a Gallos.

Al término de dicha batalla, se esperaba que Solís tuviera mayor participación, pero para su mala fortuna, fue todo lo contrario ya que solamente acumuló tres cotejos en el torneo.  La alta competencia en la plantilla regia no es un secreto, por lo que en el Clausura 2018 repitió la cifra de partidos y para el Apertura 2018 no tuvo ni un minuto, siendo dos años después desde su llegada, que empezó a trazar su historia con Tigres.

El hacerse del puesto titular llevó un largo proceso de la mano de varios técnicos, pero luego de cuatro años en la institución, Solís alcanzó uno de sus cometidos al ser quien transmite serenidad en la posición, luego de colocarse en la lista de las porteras más cotizadas del certamen, esto gracias a lo hecho en ocho semestres.

Ahora, a sus 25 años,  cuenta con 74 cotejos disputados, 5 liguillas, 2 finales y 3 títulos con las Amazonas, en donde el Guard1anes 2021 luce prometedor para su cuenta personal.

Para esta final, la efectividad de ambas porteras es  uno de los ingredientes que tiene a los seguidores con altas expectativas, por lo que el espectáculo bajo los tres palos estará presente.

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