Marco Montoya

Foto: Gregory Shamus | AFP

Un bombazo de Robbie Grossman a un strike de que acabara el partido dejó tendidos a los Yanquis en extra innings. 3-2 se llevaron el triunfo los Tigres.

RECIBE EN TU CORREO LAS MEJORES NOTICIAS DEPORTIVAS, SUSCRÍBETE AQUÍ

El patrullero tenía cuenta llena y dos outs cuando mandó la pelota a las tribunas del jardín izquierdo para terminar el juego ante la incredulidad del lanzador Justin Wilson, quien se quedó a un pitcheo del salvamento.

Ambos conjuntos pudieron definir el desafío antes; Grossman se quedó olvidado en la segunda base por Detroit durante el octavo capítulo, mientras que Giancarlo Stanton y Aaron Judge se poncharon con dos corredores en circulación instantes después.

Gerrit Cole lució, el pitcher estelar de los neoyorquinos cumplió con otra salida de calidad, ha recibido una rayita o ha colgado el cero en cinco de sus últimas siete actuaciones. Se quedó sin decisión ante el desempeño de su rival monticular.

Quizá los Tigres sean uno de los peores equipos en cuanto a récord en las Grandes Ligas, pero cada que Casey Mize sube a la lomita aumentan sus posibilidades de ganar. El novato respondió una vez más, lanzó cinco episodios, ponchó a siete rivales, recibió cinco imparables y una carrera. Un bombazo de Rougned Odor terminó con su dominio en el quinto rollo.

Los felinos tomaron la ventaja en el episodio más complicado de Cole, rompieron el cero tras pegar tres sencillos de manera consecutiva. El daño fue mínimo después de que Miguel Cabrera bateara un rodado para doble play.

Los relevistas controlaron el resto de las acciones hasta que se llegó a las entradas adicionales. Aaron Judge descontó por Nueva York, pero el júbilo en el Comerica Park llegó con el batucazo de Grossman.

?Escucha nuestro podcast?