MILES de oficiales fueron los encargados en guardar la seguridad en el encuentro entre Cruz Azul y Guadalajara.

En un principio un par de conatos de bronca fueron los que se presentaron a las afueras del inmueble, pero fueron controlados de gran formas, aunque dentro del estadio no pudieron detener la violencia.

Apunto de iniciar el segundo tiempo, la Sangre Azul y los policías en la zona comenzaron a golpearse con todo. Toletes y banderas se unieron en agresividad que solo terminó con el inicio del complemento.

Pero la cosa no quedó ahí, con cinco minutos de iniciado el complemento, volvieron los golpes hasta que los encargados de la ley se llevaron a cinco personas de la “barra”, así fue como se terminaron las agresiones. ¡Una verdadera lástima! (Miguel Ángel Mújica/Foto: Jesús Téllez).