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FOTO: Xavi Bonilla | AFP

Sergio Pérez fue uno de los pilotos más afectados por la tormenta que cayó en la recta final del Gran Premio de Rusia, el mexicano lucía encaminado a finalizar en la tercera posición, pero la pista mojada causó que bajara hasta la novena plaza. Checo confesó que tardarse una vuelta de más en acudir por neumáticos de lluvia acabó sus aspiraciones.

“No sabíamos si llovería más o menos, creo que cuando hicimos una vuelta extra aumentó realmente la lluvia y destruyó nuestras opciones de podio”, expresó el miembro de Red Bull al término de la competencia.

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El tapatío defendió el hecho de quedarse en la pista más tiempo del ideal tras señalar que el panorama lucía alentador en algunos lados de la pista de Sochi.

“En ese momento se veía como la decisión correcta, porque el sector uno y el sector tres estaban bastante secos, entonces podías mantener bien la temperatura de los neumáticos”, argumentó Checo, quien se mantiene en el quinto lugar entre los pilotos con 120 unidades.

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Pérez también aseveró que fue una resolución tomada en equipo, la apuesta no le salió a la escudería del toro rojo, pudo tener a sus dos pilotos en el podio, pero sólo Max Verstappen lo consiguió.

Otro momento clave de su carrera fue cuando los mecánicos tardaron 8.9 segundos en cambiarle sus ruedas durante la primera parada, el movimiento comprometió la carrera del mexicano.

“Tuvimos una parada lenta y quedamos detrás del McLaren y el Ferrari. Perdimos nuestra chance. Creo que se veía muy prometedor y podría haber sido nuestra carrera porque tendíamos una gran ventaja con los neumáticos”, sentenció.

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