MARCO MONTOYA

FOTO: DYLAN BUELL | AFP

Los Rojos todavía tienen la vela encendida a la espera de un milagro para alcanzar los playoffs, la novena de Cincinnati prolongó sus esperanzas por lo menos un día más después de arrollar 13-1 a Pittsburgh.

TE RECOMENDAMOS: Julio Urías se acerca a las 20 victorias del Toro Valenzuela

Joey Votto volvió a agarrar a macanazos a los serpentineros de los Piratas, el primera base pegó dos cuadrangulares durante la jornada y aumentó a 35 su cosecha anual. Cinco veces se fueron para la calle los cañoneros locales.

Desde el primer inning se visualizó la paliza, cuatro veces timbraron los comandados por David Bell. Nick Castellanos rompió el cero con un elevado lo suficientemente profundo para que Jonathan India pisara el plato desde la tercera base.

Votto despachó su primer tablazo de cuatro esquinas con un compañero en los senderos. A pesar de que el panorama se había limpiado, el abridor Connor Overton se volvió a meter en problemas, su actuación duró una entrada.

Una práctica de bateo vivieron los Rojos, conectaron 17 imparables y castigaron a cada uno de los cuatro lanzadores que subieron al montículo por los visitantes.

En el cuarto tramo continuó el daño, Votto conectó su segundo vuelacercas del día y Eugenio Suárez repitió la dosis. Cuando los Piratas ya sólo pensaban en el final, Nick Castellanos y Jonathan India se sumaron a la repartición de pirotecnia. Ambos encontraron jugadores deambulando por las colchonetas.

Salvo el pitcher abridor, cada elemento en la alineación inicial dio por lo menos un inatrapable. Del otro lado, sólo Anthony Alford lució al madero, Pittsburgh se acerca a los 100 descalabros.

El colombiano Reiver Sanmartin se apuntó la victoria en su debut sobre la Gran Carpa. Retiró 5.2 capítulos en los que recetó cinco chocolates, aceptó una rayita.

Para que Cincinnati se meta a los playoffs necesita ganar sus últimos cinco desafíos y que San Luis pierda todos sus choques, quizá luzca como un milagro, pero ya dieron el primer paso tras sobrevivir a su primera prueba.

Recibe vía WhatsApp todas nuestras noticias, manda la palabra ALTA en este enlace

Detroit estuvo cerca de la sorpresa

Chicago sufrió de más en su victoria sobre Detroit, los patipálidos tuvieron que echar mano de Liam Hendriks para apagar la remontada felina. 8-7 se impusieron los Medias Blancas.

Un despliegue ofensivo de seis carreras en el cuarto capítulo sobre el novato Matt Manning encauzó a los comandados por Tony LaRussa. Dos dobletes, un sencillo y un jonrón de Yasmani Grandal cayeron sobre los Tigres, 10 bateadores desfilaron en el tramo.

La paliza creció con el batucazo de Eloy Jiménez, el dominicano lució al bat, pegó tres imparables en sus cuatro turnos.

El marcador reflejaba 8-2 cuando los locales comenzaron a rugir. A pesar de que Chicago recurrió a lo mejor de su bullpen, por poco se lleva la sorpresa. Detroit armó un rally de cinco rayitas en el octavo inning.

Eric Haase remolcó a un par de corredores con un sencillo por el prado izquierdo, luego Niko Goodrum limpió los senderos con un triple, Jonathan Schoop trajo una más con un elevado de sacrificio.

La tensión se elevó a tal grado que después de un desliz en segunda base de José Abreu se vaciaron las casetas, previamente le habían dado un pelotazo.

Al final, Hendriks debió ingresar desde bullpen, el taponero se apuntó su rescate número 37, la segunda cifra más alta en MLB.

El mexicano Isaac Paredes se quedó en blanco en sus tres turnos al bat.

RECIBE EN TU CORREO LA INFORMACIÓN MÁS DESTACADA DE LOS DEPORTES, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!

?Escucha nuestro podcast?