JOSÉ ÁNGEL RUEDA

FOTO: LINDSEY WASSON | AFP

Si hay un equipo que siempre le complica la vida a los Seahawks son los Rams, este jueves en el Lumen Field de Seattle no fue la excepción. La franquicia de Los Ángeles estaba obligada a dejar atrás la dolorosa derrota contra los Cardinals y lo ha hecho con un solvente 26-17. Los Rams retomaron el camino del triunfo, Seattle una vez más presume marca negativa, y encima perdió a Russell Wilson por lesión.

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Más allá de un inicio complicado en el que los Seahawks tomaron la ventaja tras un buen pase de 19 yardas de Russell Wilson a DK Metcalf, los Rams encontraron la manera de mover el ovoide. Matthew Stafford va encontrando complicidades importantes conforme pasan las semanas. Esta vez tocó el turno del receptor Robert Woods, quien atrapó 12 de 14 pases para un total de 150 yardas.

Esta facilidad para acercarse a la zona roja fue bien aprovechada por Los Ángeles, que durante el segundo cuarto logró poner en el marcador 16 puntos sin respuesta, con un acarreo de 5 yardas por parte de Henderson y una buena recepción del ala cerrada Tyler Higbee en la zona prometida, a poco menos de cinco minutos para el final de la primera mitad.

Los Seahawks vieron mermadas sus posibilidades de remontada luego de una desafortunada lesión de su mariscal de campo Russell Wilson, que un choque con Aaron Donald tuvo que abandonar el partido por molestias en el dedo medio. En su lugar entro Geno Smith.

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El quarterback suplente sacó la experiencia para montar una serie ofensiva que de alguna forma le dio ánimo a Seattle. Fue una serie ofensiva fugaz que terminó con un pase de 23 yardas a DK Metcalf y que abrió la posibilidad de un cierre dramático, pero los Rams no estaban dispuestos a dejar escapar tan fácil la ventaja.

En ese momento de máxima presión surgió la conexión entre Stafford y Cooper Kupp, que con dos buena recepciones dejó a los suyos a unas yardas de la zona de anotación, a la que instantes después entró Sony Michel en un acarreo sin contacto.

Los Seahawks lograron acercarse con un gol de campo Jason Myers y todavía tuvieron una última serie para sacar el partido, pero Geno Smith se equivocó y regaló el ovoide. Hizo falta la frialdad de Wilson para esos minutos finales. Los Rams retomaron el camino del triunfo, Seattle una vez más presume marca negativa.

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