Rubén Beristáin | Enviado

FOTO: Ramón Romero | ESTO

Jesús Molina tiene una deuda pendiente con Chivas, pero rendirse nunca ha estado en sus planes. Con varias decepciones en la Perla Tapatía alguna vez llegó a querer tirar la toalla, pero su ánimo de trascender con el club al que ha aprendido a querer desde su llegada en el 2019, ha podido más que cualquier cosa.

El mediocampista fue identificado por mucho tiempo con otros colores, específicamente con los del América, pero en la actualidad es un referente absoluto del Rebaño Sagrado. A pesar de esa clásica rivalidad, supo ganarse el respeto de lo suyos, hizo a un lado todas las críticas en su contra, sin embargo no todo ha sido felicidad. Los éxitos no han llegado. Esa es la espinita que tiene clavada y así lo compartió con el Diario de los Deportistas.

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“Cuando llegué aquí me propuse ser campeón, el poder levantar campeonatos, no ha podido ser así, pero ojalá éste sea el bueno y pueda yo cumplir con el objetivo que me propuse que es ser campeón en Chivas. No es porque yo no haya querido que los torneos pasado no hayan sido del todo buenos, ese mismo pasaje que he tenido, me ha dado lo suficiente para valorar más la institución”, expresó con sinceridad.

Desde que Molina llegó al club más popular de México, las Liguillas no han sido recurrentes. De cinco oportunidades, sólo ha podido disputar una. El torneo pasado no pasaron del repechaje y en un par más ni siquiera lograron un boleto. Ahora el veterano es el encargado de expresar su deseo a todos para crear un ambiente distinto.

“Es algo que anhelo, pero se ha tornado muy difícil. Ha habido momentos donde se ha pensado hasta en tirar la toalla, pero tenemos que salir adelante, no podemos sufrir por cosas que ya pasaron, sólo queda picar piedra, tengo que contagiar a mis compañeros para lograr ese objetivo”, aseveró.

“Vine con ilusión, mucho compromiso. Estar en un club tan grande como Chivas era muy importante para mí. Los resultados no han sido lo que yo esperaba o lo que imaginé, pero estamos en ese trabajo arduo para conseguirlo. Quiero dejar huella, todavía no he cumplido con el objetivo, es la realidad, hemos quedado a deber, no sólo en lo personal, también en lo grupal”, añadió con un tono enérgico.

Chuy es ya un jugador veterano, pero aún se siente con fuerza para cumplir con su meta.

“Ser campeón con Chivas sería ponerle la cereza al pastel. Todavía me faltan algunos añitos, estoy por cumplir 34, me visualizo en Chivas, me encantaría levantar la Copa, todo el plantel está consciente que hemos quedado a deber, pero tenemos mucha hambre de poder levantar esa copa”, remató.

TRES FINALES PARA LA LIGUILLA

Guadalajara no puede fallar más. Si Jesús Molina quiere dar un paso importante para cumplir con su anhelo de ser campeón, Chivas tiene que sacar buenos resultados en las últimas tres jornadas del Grita México 2021. Prácticamente un cierre perfecto. Por el momento ocupan el octavo peldaño. Si le ganan a Cruz Azul podrían subir al quinto, pero si pierden podrían quedar fuera del repechaje. De ese tamaño es la importancia del duelo de esta noche en el estadio Akron.

“Si, totalmente, depende de nosotros. Quedan tres finales y tenemos que afrontarlas como tal. Estamos haciendo todo lo posible para meternos en Liguilla, para pelear por el campeonato tan ansiado que queremos”, reconoció a ESTO.

El próximo reto no será nada fácil. El campeón del futbol mexicano se meterá a territorio tapatío y los tres puntos son la imperiosa obligación. “Será fundamental sacar la victoria ante Cruz Azul. Serán finales. Así lo hablamos ante Toluca y se ganó. Lo hablamos contra Xolos, era fundamental porque ganar era para quedar en cuarto o quinto. Desgraciadamente no fue así, pero tampoco se perdió. En nuestra cancha tenemos que aprovechar la localía, no será nada fácil, pero si ganamos nos volvemos a posicionar en la parte alta de la tabla”, dijo.

“El próximo partido será fundamental para nuestras aspiraciones, enfrentaremos a un gran rival, será de tú a tú y el que menos se equivoque es el que ganará”, añadió.

QUIEREN UN PROCESO LARGO

Jesús Molina alguna vez dijo que en Chivas se han llevado a muchos técnicos ‘entre las patas’, debido a los malos resultados. La realidad le da la razón. Son cinco técnicos los que ha visto el capitán en un lapso de casi tres años. Esa actualidad desea cambiarla, ya que en su opinión no puede seguir esa constante en el redil rojiblanco.

“Depende totalmente de los que estamos dentro, el poder hacer lo mejor, lo que dependa de nosotros para el bien del equipo. En el futbol todo puede pasar, hay un rival enfrente que también quiere ganar, hay muchas circunstancias. Todo lo que dependa de nosotros tenemos que hacerlo al servicio del grupo, de esa manera se podrán ver más continuidades en los directores técnicos. Hoy está Marcelo, lo apoyaremos el tiempo que le toque estar. Uno como jugador está para aceptar las cosas como vienen”, finalizó.

DESEA RETIRARSE EN CHIVAS

Jesús Molina debutó en Tigres, vivió una de sus mejores épocas con las Águilas, pero tiene un lugar especial para Chivas de forma definitiva. El jugador veterano ve todavía lejano su retiro, pero en cuanto lo decida no tiene más opciones. Para ello, precisamente es que debe entregar buenos resultados para cumplirlo. “Me encantaría retirarme en un equipo tan grande como lo es Chivas, sería la ilusión. Sé que no depende totalmente de mí, pero si en lo que haga dentro de la cancha va a hacer que los directivos estén convencidos de sí debo continuar”, aceptó. “A pesar de todo lo que hemos vivido, de los malos momentos, de las críticas, porque he sido muy criticado por mi edad, por la experiencia, por el tema de que grupalmente no ha salido bien. En ese sentido hemos quedado a deber”, reflexionó.

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El mediocampista nunca imaginó su actual presente, pero hoy lo disfruta al máximo.

“La realidad es que nunca estuvo en mi cabeza ni me imaginé poder llegar a Chivas. Se da la oportunidad, la tomé con mucha ilusión, como un reto importante en mi carrera, sobre todo por lo que representa el equipo. Mi pasado estuvo en el odiado rival, hablando deportivamente, sabía que no sería fácil, pero obviamente quise aceptar el reto y no me arrepiento, me ha venido a cambiar en muchos sentidos”, finiquitó.

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