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20, diciembre 2021 - 22:43

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Vikings (1)

Foto: Jonathan Daniel/AFP
Las múltiples bajas por COVID-19 le pasaron factura a unos Browns que desperdiciaron la oportunidad de asaltar la cima de la AFC Norte.
Un gol de campo de 48 yardas cortesía de Daniel Carlson con el tiempo llegando a su fin, le permitió a los Raiders llevarse una sufrida victoria (16-14) del FirstEnergy Stadium.
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Cleveland se quedó muy cerca de sacar el resultado positivo de la mano de Nick Mullens, quien hasta hace un par de semanas se encontraba sin equipo. La defensiva le había interceptado el ovoide a Derek Carr con poco más de dos minutos en el reloj, pero el ataque de los Browns fue incapaz de conseguir un primero y diez que se consumiera el tiempo restante.
Forzaron a Nick Chubb en las tres oportunidades y al final tuvieron que regresarle la posesión a la visita, que con minuto y medio logró avanzar cerca de 40 yardas para ponerse en territorio de Carlson, donde prácticamente el #2 es infalible.
Terminó siendo un choque dominado por las defensivas, donde al final Carr fue determinante. El pasador completó 25 de sus 38 envíos para 236 yardas, un touchdown y una intercepción.
Por su parte, Mullens acabó con 20 de 30 para 147 yardas y una anotación. Los Browns terminaron echando de menos la ausencia de sus dos QB’s principales. Ni Baker Mayfield ni Case Keenum pudieron participar en un encuentro que les complicó sus opciones de avanzar a la postemporada.

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Cleveland se puso con marca de 7-7, cayendo al último lugar de su división, no pudiendo sacar provecho de la derrota de Baltimore. En tanto que los Raiders, se encuentran con el mismo registro en el tercer lugar del Oeste.

MINNESOTA CUMPLE Y SIGUE SOÑANDO CON PLAYOFFS

Los Vikings no pierden la fe de meterse a la postemporada. Si el partido pasado el dramático triunfo sobre los Steelers mantuvo viva la esperanza, la victoria de este lunes por la noche, 17-9 sobre los Bears, los mete de lleno en la lucha por uno de los comodines a falta de tres semanas para el final de la campaña regular.

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La costumbre dicta que Minnesota suele jugar como le juega el rival: esta noche, en el Soldier Field no fue la excepción. Los Vikings olvidaron la explosividad que mostraron ante Pittsburgh y ofrecieron un juego conservador. El talento de su ofensiva, sin embargo, les permitió poner los puntos necesarios para tomar la ventaja. El primer touchdown llegó gracias a una conexión que con el paso de los partidos no hace más que crecer. Kirk Cousins, de partido discreto, encontró en la zona prometida a Justin Jefferson, que llegó a nueve touchdowns en lo que va de la campaña.
Cuando parecía que los Vikings se escaparían, la defensiva de los Bears se encargó de mantener a su equipo en el partido. Chicago logró capturar en cuatro ocasiones a Cousins, que ante la presión cometió algunos errores. El pecado de los Osos fue el no haberlos aprovechado. La ofensiva comandada por Justin Fields movió el ovoide, pero su poca efectividad en zona roja resultó determinante. Los Bears desperdiciaron varias cuartas oportunidades, dejando puntos importantes en el camino, además de perder tres balones en momentos clave.
Pese a las dificultades, Minnesota encaminó el triunfo con un touchdown en el tercer cuarto. Cousins encontró solo en las diagonales a Ihmir Smith-Masette. El golpe fue definitivo para unos Bears que, pese a todo, no dejaron de intentarlo, incluso se acercaron de manera peligrosa en sus últimas series, hasta que finalmente el ala cerrada Jesper Horsted puso puntos en el marcador, cuando el reloj marcaba apenas un segundo. Los Vikings viven, el panorama para los Bears luce complicadísimo.

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