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Mira

4, marzo 2015 - 10:43

┃ Luis García Olivo

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CARTAGO, Costa Rica.- La experiencia de estar en este país hace abrir los ojos y valorar todas las comodidades que brinda el futbol mexicano, pues el jugador costarricense no goza de los mismos placeres. Sin embargo, es un jugador que puede competirle a cualquiera.
“El jugador en México lo veo muy consentido y no tan fácil te adaptas. Aquí (en Costa Rica) pueden entrenar en tierra y el futbolista no dice nada. Lo más importante es que son muy humildes, esas son las circunstancias que tiene el futbol, lo que llevaría a México sería eso, la humildad con que trabajan aquí”, dice sin dudarlo Enrique Meza Jr., consciente de los privilegios mexicanos.
Y es que la principal diferencia con el futbol nacional es “la infraestructura, no es lo mismo, en las fuerzas básicas (de Costa Rica) no se trabaja igual que en México, no tienen el suficiente material, no hay canchas, los altos salarios no son los mismos y menos hay inversión”, agrega Diego Meza.
Así que con la humildad y calidad del jugador tico, mandan un mensaje a los 17 clubes de la Liga MX. “Son buenos jugadores, son baratos, nada caros, creo que México tendría que voltear un poco más hacia estos lugares porque siempre es común a ver argentinos, paraguayos, uruguayos y colombianos”.

TRES EXTRANJEROS EN EL FUTBOL COSTARRICENSE
Con la apertura a naturalizados en la Liga MX y con base en el exitoso Mundial de Costa Rica en Brasil 2014, los hermanos Meza comparten la medida de los tres extranjeros por equipo que son permitidos en los clubes ticos, disposición que “es una buena regla acá, eso permite que los jóvenes tengan más proyección, cada país tiene sus reglas y hay que respetarlas”.
No obstante, saben que por ello hicieron un buen Mundial. “De entrada porque tienen a varios jugadores en Europa, tienen un roce internacional, en los últimos tiempos se han quitado la mentalidad de ser inferiores, ahora creen en ellos y pueden llegar a instancias grandes como lo hicieron”, dice el timonel del Cartaginés junto al logotipo de su amado equipo.
Y aunque su club es dirigido por mexicanos, los costarricenses están “conscientes que el futbol nacional es de un alto nivel, se dan cuenta de la calidad de nuestro trabajo, que somos profesionales y que estamos bien preparados. Saben lo que significa México, hay mucha rivalidad en el tema deportivo, pero fuera de ello, la gente es muy amable, es de pura vida”, finalizan los hermanos.