Con la tecnología de Google Traductor

Mira

4, febrero 2022 - 15:52

┃ José Ángel Rueda

Aaron Donald

 Foto: Christian Petersen/AFP
Considerado de forma unánime como uno de los mejores defensivos de la última década, Aaron Donald busca la cereza en el pastel. Desde su llegada a la NFL, en el 2014, el tackle ha dominado por completo su posición, al grado de ser considerado siete veces como parte del equipo All Pro. A su paso, el jugador de los Rams se ha convertido en el líder histórico de la franquicia en cuanto a capturas se refiere, con 98. El próximo domingo 13 de febrero, sin embargo, buscará ante los Bengals ganar el Super Bowl, único galardón que le falta en una carrera que sin dudarlo será de Salón de la Fama.
Te puede interesar: Super Bowl LVI: Odell Beckham Jr. tomó su segundo aire en los Rams
El propio Donald lo sabe, su nivel es superlativo. Las líneas rivales muchas veces tienen que ponerle doble cobertura para evitar el colapso de la bolsa. “Siento que logré mucho en poco tiempo en esta liga. Lo único que me falta ahora es ser campeón”, señaló el liniero hace unos días.
La historia de Aaron Donald ha sido de dominio absoluto. El egresado de Pittsburgh llegó a la liga como la selección número 13 del Draft del 2014. Su impacto en la defensiva de los Rams fue inmediato. En su primera campaña Donald mostró su dominio al sumar nueve capturas de mariscal de campo.
El número sorprendió por el hecho de jugar desde la parte interna de la línea, y no desde el exterior, como lo hacen las alas defensivas. Su extraordinaria presentación le valió el reconocimiento de Mejor Novato defensivo del año. Puras cosas buenas estaban a su alcance. Con su 1.85 metros y sus 127 kilogramos, Donald es capaz de dominar su entorno. A pesar de no ser muy alto, para los parámetros de la posición, su fortaleza y agilidad le ayudan.
La progresión del tackle fue constante. Para su segunda campaña Donald incluso mejoró su registro del 2014, al sumar nada menos que 11 derribos de quarterback, aunado a 44 tacleadas, su mejor registro hasta ahora. La tercera temporada de Donald fue la más floja, con ocho capturas, aunque el número fue circunstancial, sobre todo por lo que vendría después.
Luego de que en el 2017 volviera a superar la frontera de las diez capturas, al registrar 11 y ser nombrado como el Mejor Defensivo de la Liga, en el 2018 lideró la NFL con 20.5, una marca que se quedó cerca de romper el récord vigente, de 22.5. Como es lógico, Donald volvió a ganar el reconocimiento de Mejor Defensivo del año.
Aunque era imposible para el jugador de los Rams mantener esos parámetros, sí ha podido encontrar una regularidad que lo coloca en élite. En sus últimas tres campañas ha cosechado 12.5, 13.5 y 12.5 derribos de mariscal. En el 2020 una vez más fue reconocido como el mejor de todos.
Su capacidad para meterle presión a los quarterbacks rivales le ha permitido entrar en los libros de récord de los Rams. Con 98 capturas en ocho temporadas, nadie tiene más que en la historia de la franquicia. Con 30 años, ese número aumentará. Su constancia también le ha permitido ser convocado en ocho ocasiones al Tazón de los profesionales.

LA REVANCHA

El partido del domingo 13, en Los Ángeles, será la segunda ocasión que Aaron Donald juegue un Super Bowl. Ya en la campaña 2018 llegó al partido grande, contra los Patriots, sin embargo, la suerte no estuvo de su lado. El tackle no pudo meterle presión a Tom Brady al terminar el partido sin capturas. Ese partido quedó en la memoria. Llegó el momento de la revancha. Joe Burrow podría pagar los platos rotos.

Recibe vía WhatsApp todas nuestras noticias, manda la palabra ALTA en este enlace

 

?Escucha nuestro podcast?