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Mira

6, marzo 2015 - 23:05

┃ María Vega

nota-otros-barrondo

POR GUILLERMO MARTÍNEZ G.
ENVIADO

CHIHUAHUA.- El guatemalteco Érick Barrondo será el rival incómodo de los mexicanos en los 20 kilómetros, que hoy se enfrentarán en el Circuito Internacional de Marcha.
El medallista de plata en los Juegos Olímpicos de Londres es la sensación en este evento, a pesar de que es la primera vez que compite en esta ciudad.
“Estoy muy contento, ilusionado y satisfecho por toda la atención que se nos ha brindado a mi equipo. Sabemos que esta será una excelente competencia porque el mundo de la marcha está creciendo. Es cierto que los demás atletas también se han preparado, pero venimos con el objetivo de llevarle a mi país un buen resultado”.
Mencionó que el equipo de Guatemala está buscando la clasificación en dos eventos, los Juegos Panamericanos y el Campeonato del Mundo.
“Esa es la vista principal para la que nos preparamos. No buscamos marcas todavía sino una buena posición. Pero sí queremos ganar. Mejorar el tiempo en estas condiciones como la altura será lo mejor para continuar hacia adelante”.
Platicó Barrondo que no se siente como el rival de los mexicanos, ya que todos se han preparado para ganar.
“Simplemente aprovecharemos el descuido de los otros, lo cual nos ha ayudado a llegar a la meta primero. Todos se basan a la marca que tengo de 1:18’25”, pero podría hacer 1:30”. Aquí nunca se sabe”.
Érick, también medallista de oro en los Panamericanos de Guadalajara, argumentó:
“Tenemos algunos errores técnicos que venimos a corregir, marchar a la par de los demás y despuntar para lograr el primer lugar. Todos seremos difíciles”.
Teniendo la marcha muy poco tiempo en Guatemala como deporte prioritario, agregó:
“Hemos comenzado un proceso con todas las edades y categorías. Sobre todo no cometer los errores de otros países de que premian a sus atletas sin antes dar resultados. Nosotros nos vamos mereciendo las cosas con resultados”.
Dijo que en sus inicios no tenía ni en dónde dormir: “Apenas tenía para medio comer, sin embargo, me propuse salir adelante y todo eso me enseñó a que debía trabajar duro si deseaba cambiar mi forma de vida. Por eso fue que conseguí la medalla olímpica. Por aferrarme a no quedarme como los demás, sin triunfos y ser del montón”.