Jorge Briones | Enviado

FOTO: Jorge Briones

Acapulco, Gro.- El municipio de Acapulco ha sido el más afectado de todo el estado de Guerrero desde el inicio de la pandemia del COVID-19.

De marzo de 2020 a la fecha, se han contabilizado un total de 31,470 casos confirmados, con 2,750 defunciones y 811 sospechosos. Estas alarmantes cifras son más del doble de las que tiene el segundo municipio más golpeado, que es Chilpancingo de los Bravo con 14,684 casos confirmados y 637 muertos.

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De acuerdo al último reporte de las autoridades de salud del estado, existen 3,912 casos activos confirmados, con una letalidad del 7.66%.

Estas cifras no han sido suficientes para que las autoridades limitaran el cupo de la Arena GNP Seguros. Grupo Mextenis tuvo el permiso para vender las poco más de 10,000 localidades por jornada que tienen contemplado a partir de la primera jornada de actividades en el torneo.

“Es una buena semana para nosotros como trabajadores, sube el turismo y así podemos recuperarnos algo de esta crisis económica”, comenta un taxista del sitio que se encuentra fuera del recinto.

“Hay que cuidarse, pero también tenemos que seguir trabajando para poder comer”, añade.

Cabe destacar que la edición del año pasado, la último en su antigua sede y que se disputó en medio de los picos máximos de contagios en la región, se llevó a cabo con únicamente el 30 % de los aficionados en el estadio.

PRUEBA COVID, UNA TRAVESÍA PARA INGRESAR A LA ARENA GNP

Como una de las medidas utilizadas por la organización del ATP 500 mexicano para evitar el contagio del COVID-19 dentro del complejo, solicitaron que todos los asistentes presenten una prueba negativa con un máximo de 24 horas de antigüedad.

Esta medida ha provocado un gran caos en las inmediaciones del recinto. Filas larguísimas y una pérdida de tiempo que llega a ser de hasta tres horas, creó un malestar de los asistentes que decidieron hacerse la prueba en el módulo que puso el torneo en el estacionamiento.

Con un precio de $320, los aficionados cuentan con la opción de hacerse la prueba antes de ingresar al recinto, no sin antes esperar horas en lo que es atendido por el personal de salud.

Previo al choque inaugural, la fila inclusive logró salirse del estacionamiento por la gran cantidad de personas que utilizaron esta opción para cumplir con el protocolo. Una vez realizada la prueba, tenían que esperar entre 15 a 20 minutos para darles el resultado, con ello un código que le sería indispensable para pasar el último filtro.

“Es desesperante, hay mucha gente”, comentó una de las asistentes.

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