FOTOS Y TEXTO: ALLAND JHONNATHAN

Un trabajo de más de ocho horas de preparación con 22 menús diferentes han realizado los encargados de la cocina del Abierto  Zapopandesde el pasado 15 de febrero y hasta el sábado 26 con el objetivo de satisfacer a 600 paladares de distintas partes del planeta de forma diaria.

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El comedor se encarga de proveer de energía a todos aquellos trabajando durante estos días en el Centro Panamericano, sede del evento. Sí, ellos alimentan a atajadores, directivos, gente de logística del certamen y a medios de comunicación para que el torneo o la cobertura del mismo salga de la mejor manera.

El comedor labora con casi una docena de gente, ya sea en la preparación o sirviendo con tal de estar a tiempo a las 13:00 y 19.00 horas, los dos horarios donde se recibe a todos aquellos en busca de un “cargar la pila”.

“Atendemos a 600 personas en dos turnos dándole a la gente un menú balanceado con guisado, dos guarniciones, postre y agua fresca”, apunta José Luis, encargado de la cocina, a ESTO.

“Cada menú diario nos toma alrededor de ocho horas en el afán de tenerlo listo acá en línea, caliente, para servirlo. Todo esto considera desde que se van a hacer las compras al mercado, el lavado de la fruta, verdura, la preparación o cocina de los alimentos hasta ofrecer el servicio”, agrega.

Si bien la labor de cocina es titánica, a ellos les basta con un “gracias” o un “muy rico todo, me encantó esto o me puedes servir tantito más del arroz o del guisado”, la mejor paga para todos ellos.

La experiencia ha sido enriquecedora para este grupo de cocina debutante en Zapopan, pues ha convencido a paladares muy exigentes, ya sean nacionales o extranjeros.

Pero a un día del fin de las actividades en el Abierto, y aún con trabajo por delante, esta gente ha comenzado a extrañar los piropos hacia sus artes culinarias, sobre todo el de los italianos encargado de pantallas y audio, quienes siguen encantados con los frijoles y ya han pedido, como se dice en México, “hasta su itacate”.

“Ha sido una experiencia muy buena porque hemos tenido la chance de atender extranjeros y gente nacional de distintas partes del país. Los italianos nos han dicho que les gustaron mucho los frijoles”, remata.

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