JOSÉ ÁNGEL RUEDA

FOTO: MEXSPORT

Las imágenes de la trifulca en la Corregidora de Querétaro dieron la vuelta al mundo. El futbol mexicano quedó expuesto a la interpretaciones que lo catalogan como violento. En ese sentido, Javier Aguirre, habló para “El larguero”, de España, donde trató de explicar lo que se vive en los estadios mexicanos. El “Vasco” dejó una frase contundente, al asegurar que en estos tiempos no llevaría a sus hijos a un estadio visitante.

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“Yo cuando jugaba se llamaban porras, la del América, Chivas. Íbamos con la familia, mis padres iban al Azteca a verme jugar. Hoy no me atrevería a ir con un hijo mío a un partido de visitante”, señaló el director técnico.

La violencia entre los aficionados de Querétaro y Atlas coincidió con el momento complicado que vivió Aguirre antes de ser cesado por los Rayados. Técnico y jugadores fueron increpados en repetidas veces por un grupo de aficionados que de manera violenta le pedían compromiso dentro del campo.

“Esta crispación tiene un tiempo, los equipos hacen lo que pueden, intentan, pero llevamos un tiempo en que estamos sometidos al ánimo o desánimo de las barras. Al final del entrenamiento te esperan, te gritan, van a los aeropuertos y ya no digas visitantes, los propios”, dijo Aguirre para el medio ibérico.

El “Vasco” confía en que las medidas implementadas por el futbol mexicano, entre las que destacan la credencialización de los integrantes de las barras, ayuden a calmar el ambiente, sobre todo ante la escalada de una violencia nunca antes vista en los inmuebles. “Es algo que estamos a tiempo, afortunadamente no ha fallecido nadie, pero fue espeluznante. Nunca en mi vida vi eso”.

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