RUBÉN BERISTÁIN Y GUILLERMO ABOGADO

Foto: Rubén Beristáin

La seguridad tuvo que aumentar. Los sucesos previos al partido entre Cruz Azul y Chivas, donde la afición rojiblanca protestó con desmanes y violencia en el hotel de concentración del equipo por sus malos resultados, obligaron a que la Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México desplegara un operativo de vigilancia y vialidad en el estadio Azteca con un total de 1,905 uniformados con el propósito de garantizar el desarrollo pacífico de las actividades deportivas.

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Fueron 905 policías sectoriales, de la Montada, de la Subsecretaría de Control de Tránsito, que estarán apoyados con 74 patrullas, seis motocicletas, seis ambulancias del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), así como un helicóptero de la Dirección Ejecutiva de Servicios Aéreos Cóndores, quienes supervisarán el arribo y salida de los asistentes al cotejo de la jornada 14 del Clausura 2022.

“Como parte de las acciones preventivas, mil efectivos de la Policía Auxiliar (PA) serán desplegados en las inmediaciones, los accesos y en la zona de gradas del estadio, donde serán colocados filtros de revisión, a fin de retirar objetos que puedan poner en riesgo la integridad física de los aficionados”, informaron a través de un comunicado.

EL HOTEL FUE UNA FORTALEZA

La serenata del viernes terminó en desgracia y empañó una vez más al futbol mexicano. Por esa razón el Rebaño Sagrado se cuidó de más. Cerca de 40 uniformados tuvieron que resguardar el hotel de concentración donde se hospedó Chivas, que también tuvo que maximizar sus protocolos, de cara a su partido ante La Máquina, con el propósito de evitar cualquier otro altercado entre jugadores y afición. Cerca de 15 camionetas de la SSC se ubicaron afuera del recinto ubicado al sur de la capital, sin ningún hecho que lamentar.

VIOLENCIA CRUZÓ FRONTERAS

La violencia que protagonizó la afición de Chivas de Guadalajara durante la noche del viernes en el hotel de concentración del club tapatío previo al compromiso contra Cruz Azul traspasó fronteras, no solo la prensa nacional estuvo al tanto del lamentable acto, también los medios internacionales se percataron de lo sucedido.

El diario argentino Olé subrayó “Violencia en México: La barra de Chivas atacó al hotel de sus jugadores” y agregó “los seguidores del equipo rompieron una puerta de cristal e increparon al equipo”.

Abundó que “los resultados de Chivas no vienen siendo los deseados y la hinchada demostró su descontento en más de una oportunidad. El Clausura 2022 no viene siendo una temporada ideal, pero nada justifica lo que ocurrió este viernes por la noche en la concentración del equipo en Ciudad de México”.

Ningún jugador del Rebaño Sagrado fue agredido en el lamentable hecho aunque su integridad se vio amenazada, por lo que de inmediato la Liga MX, a través de su presidente Mikel Arriola aumentó la seguridad en los estadios para salvaguardar a los futbolistas y a los aficionados que no pertenecen a grupos radicales.

Por lo pronto el nombre de Chivas de Guadalajara se vio manchado antes del encuentro de la jornada 14 a celebrarse en el mítico estadio Azteca, en un acto de violencia más que de igual forma ensucia el balompié mexicano cuando todavía existen estragos de lo ocurrido en el estadio La Corregidora durante el Querétaro ante Atlas.

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