PAN comido serán Volador y Máximo el próximo 20 de marzo cuando Rey Bucanero exponga una vez más su cabellera haciendo pareja con Terrible en la primera función fuerte del año, la cual lleva por nombre “Homenaje a Dos Leyendas” reconociendo al fundador de la Empresa más antigua en la lucha libre, Cmll, y el luchador El Faraón en una gran fiesta en la Arena México.
Para el rudo, estos meses han sido excelentes, pues lleva una racha de victorias, encabezando su lista la victoria ante Felino, al cual le quitó la cabellera, con quien ya tenía cuentas pendientes.
El domingo 8 de marzo demostró que tiene conocimientos al imponerse ante el Ingobernable La Sombra y coronarse como campeón mundial histórico semicompleto NWA, y tal parece que no habrá quien lo pare. Así lo expresó frente al director de nuestro diario ESTO, Salvador Aguilera.

LAS RIVALIDADES
Una de las cosas que más odia Bucanero es que Máximo aproveche la situación y se vuelva besucón para ganar en los encuentros “eso es tener muy poco recurso. Que luche y que le entre a los golpes”, dijo el rudo; aunque su pleito más fuerte es con el Volador, con quien ha tenido encuentros aguerridos los cuales están a punto de terminar, “le voy a quitar lo bonito y vamos a ver si sigue hablando. Creo que no tiene la menor idea del problema en el que está metido, pero ya no hay marcha atrás. Sólo puedo asegurarles que vamos a dejar el alma en el ring y no tendremos consideración del ‘par de reinas’ que tendremos enfrente”.
Terrible y Rey Bucanero han hecho equipo durante cuatro años, y le han hecho ver su suerte a muchos técnicos, pues no se andan con rodeos. Por lo que Volador y Máximo tienen una misión muy difícil.
La derrota no pasa por la cabeza de Rey Bucanero, pues sólo conoce el triunfo y en estos 25 años tiene que incrementar sus victorias.
Bucanero ha militado en el bando rudo y en el técnico. Gracias a sus conocimientos fue contratado por la empresa japonesa New Japan cuando sólo algunos gladiadores mexicanos eran contratados. Años más tarde el artista Carlos A. Morales se lo llevó de gira a museos de renombre en Suiza, Alemania, Francia e Inglaterra, convirtiéndolo en un real embajador de la lucha libre mexicana y especialmente del Consejo. Esperemos que siga cosechando más victorias.