SAN PEDRO SULA.- Campeón absoluto. México Sub-17 se coronó en la cancha del Estadio Francisco Morazán ante un Honduras que mostró poca resistencia y se vio humillado en casa con un marcador de 3-0. Kevin Magaña, Claudio Zamudio y Ulises Torres convirtieron a la escuadra tricolor en bicampeona del Torneo de Concacaf Sub-17.
Kevin Lara y Pablo López fueron la clave para las tres anotaciones que hizo que el conjunto de Mario Arteaga levantara la copa en el Morazán, asimismo, los demás jugadores mostraron carácter y un amplio dominio que los coloca como favoritos para el Mundial Sub-17 Chile 2015 a finales de año.

EL PARTIDO
Fulminante, un conjunto azteca que saltó a la cancha ante poco más de 20 mil espectadores para demostrar el dominio en la zona de Concacaf. El silbatazo inicial se escuchó y los 22 jugadores comenzaron por la lucha del título. Ambas escuadras, México y Honduras, con el boleto al mundial ya en la mano, pero con la idea de levantar el orgullo en la mente.
Las acciones comenzaron, de inmediato México se acomodó sobre el terreno de juego y lo hizo suyo, seis minutos cuando Kevin Lara se adelantó a un costado de la cancha para entrar al área y enviar un centro que Kevin Magaña remató para abrir el marcador.
Los catrachos no veían claro, pelotazos y malas decisiones, apenas una llegada al área mexicana y los de Arteaga ya buscaban la puerta para el segundo que fue una copia exacta del primer gol, pero esta vez Claudio Zamudio fue quien llegó con la cabeza al tiro nuevamente acomodado por Lara. En la agonía del primer tiempo, Honduras parecía ascender y despertar, pero el descansó llegó y todos a los vestidores.
La parte complementaria arrancó, de inmediato los centroamericanos intentaron acortar las distancias, pero los vicios siguieron. El ímpetu invadió a los aztecas quienes buscaron y buscaron, no dejaron espacios ni esperanzas ante una “H” que recibía abucheos de su gente quienes al 55 fueron testigos del excelente disparo de Pablo López que Ulises Torres convirtió para sumar el tercero al marcador y acercarse al bicampeonato. Los espectadores comenzaron abandonar las tribunas del Morazán.
El orgullo y el hambre juvenil no desaparecieron en los hondureños, quienes intentaron dañar, pero poco encontraron. El cuarto era esperado, trabajado por los tricolores; sin embargo, los catrachos se salvaron de dos muy claras, una sobre la línea que apenas alcanzó a despreciar un elemento hondureño.
Los últimos minutos no pararon de ver lucha, por un lado la búsqueda de agrandar el marcador y por el otro el orgullo de estar en tierras propias… el tiempo se desvaneció, el silbatazo final se escuchó en un Francisco Morazán que poco a poco abandonó a sus jóvenes. ¡México bicampeón!, sumó su sexto campeonato en el Torneo de Premundial Concacaf Sub-17.