JOSÉ ÁNGEL RUEDA

FOTO: CONADE

Luego de varios meses de incertidumbre respecto a su estado físico, la ciclista mexicana Yareli Salazar finalmente tiene un diagnóstico que le permitirá recuperarse. A través de un mensaje publicado en sus redes, la sinaloense explicó que padece una enfermedad llamada Endofibrosis de la Arteria Ilíaca, una afección que entre otras cosas le impide realizar deporte de alta intensidad.

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“Después de ir con varios doctores, diferentes clínicas y muchos estudios por fin encontramos el diagnóstico, tuve que viajar a Holanda a un hospital qué tiene experiencia en esta enfermedad “rara” pero a la vez común en ciclistas, mi diagnóstico es: Endofibrosis de la Arteria Iliaca. Hay una limitación de flujo en la arteria ilíaca debido al
estrechamiento intravascular en el proximal y aún más en la parte media”, señaló la ciclista de 25 años.

Más allá de que existen tratamientos conservadores para evitar el quirófano, algunos especialistas aseguran que la mejor manera de atacar el mal es a través de una cirugía, procedimiento al que se someterá Salazar. El tiempo estimado de recuperación es de dos a tres meses, por lo que es complicado que alcance a llegar al Tour de Francia Femenino, el cual se celebrará del 24 al 31 de julio, aunque ha habido casos que la recuperación es en tiempo récord, así que habrá que esperar.

“Prácticamente no pasa sangre a mi cuadriceps y eso hace qué se duerma la pierna al momento de hacer esfuerzo! Esto solo se resuelve con una cirugía pero más adelante les daré más detalles. No voy a negar que tenía inseguridad antes de los estudios por miedo a que no saliera nada y no tuviera respuesta a este dolor tan extraño. Estoy feliz y agradecida con las personas que me rodean y que han vivido estos meses a mi lado a mi familia y equipo @ceratizit_wnt por el apoyo durante este proceso”, explicó.

El año no ha sido sencillo para la olímpica en Tokio 2020. Desde su llegada al equipo profesional alemán Ceratizit en enero pasado no ha logrado establecerse, primero por algunas molestias que se combinaron con el Covid-19.

“Desde que inició el año no me he sentido yo misma físicamente, creía que era cuestión de comenzar a competir para agarrar la forma deportiva, Comencé a competir y comenzó un dolor en la pierna izquierda muy raro que quemaba mi cuadricep al momento de ir en la zona umbral o por encima a los pocos minutos perdía la fuerza y la sensación de #PiernaMuerta, esto es exactamente lo que he vivido todos estos meses pero creo que lo más difícil ha sido la carga psicológica por no saber que estaba mal con mi cuerpo”, comentó la ciclista.

¿QUÉ ES LA ENDOFIBROSIS DE LA ARTERIA ILÍACA EXTERNA?

El padecimiento es consecuencia del exceso de esfuerzo continuado, éste produce un estrechamiento de la arteria ilíaca externa que dificulta el flujo sanguíneo hasta generar un adormecimiento y el posterior bloqueo de la extremidad, de ahí la sensación de pierna muerta.

Esta enfermedad ha afectado a ciclistas de la talla de Fabio Aru, Sam Oomen y la campeona del mundo Pauline Ferrand-Prévot. El avance en la medicina deportiva ha permitido evitar los retiros prematuros, como ya ocurrió con ciclistas como Xavier Florencio, Santi Blanco y Kiko García.

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