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23, julio 2022 - 18:59

┃ Yael Rueda

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YAEL RUEDA

Foto: AFP

Uno de los debuts más esperados en el mundo del futbol se dio este sábado. Erling Haaland se enfundó en la casaca celeste para afrontar su primer partido con el Manchester City y de inmediato dio resultado.

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Luego de que Pep Guardiola decidiera no contar con el noruego para el partido que los Skyblues tuvieron en contra del América de la Liga MX, sí lo consideró para chocar ante los Bávaros y solamente necesitó de 12 minutos para marcar su primer gol con su nuevo club.

La acción en la que cayó la diana nació al minuto 11. Mahrez cobró un tiro libre por la banda izquierda, sin embargo la zaga bávara cortó de manera precisa.

El rebote le cayó a Kevin de Bruyne y filtró la redonda hacia el área, donde recibió Grealish y ante la marcación metió una diagonal de la muerte. Erling Haaland apareció con una espectacular barrida y mandó el balón al fondo de la red.

El ariete se abrazó con sus compañeros y gritó efusivo su primera anotación que, para no variar, fue ante Manuel Neuer, uno de los arqueros que más lo sufrió en la Bundesliga.

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Erling Haaland logró el gol y espera poder brillar en el club que le dio la confianza y del cual espera convertirse en el hombre gol.

Los Haaland y el City, una tradición futbolística

La decisión de jugar con el Manchester City sorprendió al mundo, porque todo apuntaba a que el destino de Erling Haaland estaría en España, sin embargo, él optó por militar en la escuadra en la que también jugó su padre.

Alf-Inge Håland militó con los Skyblues del 2000 al 2003 y significó el último equipo de su carrera y el tercero en Inglaterra, pues antes militó en el Nottingham Forest y Leeds United.

Su retiro se dio luego de que Roy Keane le propinara una fuerte barrida que acabó con una lesión en la rodilla. Aunque Alf-Inge fue operado, no logró recuperarse de forma apropiada, por lo que tuvo que dejar el futbol de manera profesional.

Esta acción fue polémica, porque en 1997 el noruego lesionó de gravedad a Roy Keane e incluso se le acercó para decirle que se levantara.

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