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Mira

30, junio 2014 - 21:15

┃ Luis García Olivo

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EL dolor será más profundo en algunos seleccionados.

Y no tanto que se fueran con la frustración de clasificar a los cuartos de final con México, sino porque que llegaron a Brasil con el ideal de ver acción y al final se fueron con las manos vacías en cuanto a minutos mundialistas.

Este fue el caso de cinco seleccionados que no salieron de la banca, quienes vieron cómo sus compañeros se batieron en la cancha, y solamente les restó esperar para ver si suspendidos o lesionados les daban la oportunidad de jugar.

En Alan Pulido, Isaac Brizuela, Alfredo Talavera, Jesús Corona y Miguel Ponce se ejemplificó esa doble crudeza, esa doble frustración, quienes lucieron como suplentes idóneos, pero la realidad fue que Miguel Herrera no le movió a su once, se casó con los mismos y los dejó sin minutos.

El caso de Chuy Corona fue posiblemente el más doloroso, el meta de Cruz Azul aspiraba a ser titular indiscutible, pero Ochoa le arrebató el puesto y con bases, demostró el por qué de la decisión del “Piojo”.

Así que “el sentimiento se podría decir que es más, pues llegas con la idea de jugar y avanzar en todo lo que se pueda, pero siempre vemos por el grupo, por el interés colectivo y no queda más que respetar, te vas con ese sentimiento, pero queda respetar”, expresó un sincero Jesús Corona.

Brizuela era otro que merodeaba la titularidad por una de las bandas, el “Conejito” tuvo que ver a Héctor Herrera en esa posición y esto “te sirve de aprendizaje, a trabajar más, a aumentar las labores en entrenamientos y partidos” dijo, pues ante su juventud espera estar dentro de cuatros en Rusia 2018.

Finalmente, Alan Pulido fue otro que calentó la banca, el regiomontano no tuvo ni argumentos como para competirle a Gio y Peralta, pues el suplente ideal era el Chicharito, por lo que “te vas con un poco dolido, querías jugar, ver minutos, ayudar al equipo, pero siempre con la visión colectiva, nunca estar por encima de la Selección o nadie, y solo hay que respetar lo que dijo Miguel”, aseguró el joven quien pensaba mostrarse, más allá de que el Olympiacos de Grecia lo tiene supuestamente firmado, “no lo sé, hasta que llegue a México se verá”, dijo apresuradamente.

Así el adiós de ellos, quienes tendrán que esperar hasta Rusia 2018 para ver a México en cuartos de final y tener minutos mundialistas. (LGO/ Foto: Jorge Barrera)