VERACRUZ.- La brisa del mar lo acompaña desde chico, Melitón Hernández creció en Poza Rica, por esa razón conoce a la perfección la calidez y alegría de los veracruzanos, el portero escualo no dudó en realizar un paseo con ESTO en las playas Villa del Mar.
El guardián de la portería jarocha caminó a paso lento, muchos americanistas lo reconocieron, algunos le “reclamaron” por detenerle el penalti a Sambueza en el último partido, “por tu culpa pagué las apuestas”, le gritó una señora a distancia, Hernández sólo rió.
La caminata siguió, Melitón abordó una lancha y contempló el paisaje, decenas de niños brincaban en el mar.
Posteriormente charló con unos lancheros, el par de personajes le levantaron los brazos, ellos reconocen la labor de Melitón bajo los tres postes escualos.
A su paso varias familias le solicitaron una fotografía, Melitón accedió con gusto. La sencillez siempre lo ha caracterizado.
Ya en confianza Hernández tomó a unos pulpos que acaban de ser capturados, el portero lo hizo sin pena, él está acostumbrado al océano.
El recorrido siguió, los rayos fueron más incandescentes a cada paso.
Después de unos minutos Melitón optó por ir por un raspado para apaciguar el calor, el portero sorprendió al vendedor al preparárselo el mismo.
El ex de León subió a la bicicleta y raspó el hielo, los sabores fueron variados: limón, tamarindo, guayaba, durazno, grosella, guanábana y fresa, Hernández se dio un auténtico festín.
Así culminó el paseo, su familia lo esperaba para ir a tomar un café a La Parroquia.
El héroe escualo se despidió de los lectores del Diario de los Deportistas con una sonrisa de oreja a oreja.
Melitón, jarocho de corazón.