POR ERNESTO CASTELLANOS G.

EL deporte está otra vez de luto. La muerte del luchador Pedro Aguayo, conocido como “El Hijo del Perro Aguayo”, conmocionó a la sociedad mexicana, la cual contempló horrorizada los videos en los que se aprecian los últimos instantes en la vida del magnífico luchador, en un combate que sostuvo en el Auditorio Municipal de Tijuana hace dos viernes.
Este trágico suceso se viene a sumar a varios más que ha sufrido la lucha libre, un deporte de contacto, un deporte de alto peligro.

EL MÁS FAMOSO
Cuando hablamos de las tragedias de la lucha, tenemos que señalar que no todas han acaecido en el cuadrilátero. Y la muerte más sentida por el pueblo mexicano ha sido aquella del 5 de febrero de 1984, cuando El Santo, el más grande luchador mexicano, dejó de existir a causa de un infarto al corazón.
El Santo, don Rodolfo Guzmán Huerta estaba retirado de la lucha, pero decidió seguir trabajando y arriesgando su vida, ya que realizó una temporada de escapismo en el Teatro Blanquita. Esa noche del 5 de febrero realizó un esfuerzo sobrehumano, sufrió un infarto, y aunque fue llevado a un hospital falleció sin remedio.
Miles de personas lo despidieron hasta su última morada, en Mausoleos del ángel. El Santo se hizo famoso en el mundo gracias a las 52 películas que filmó.
Nacido el 23 de septiembre de 1917 en Tulancingo, Hidalgo, Rodolfo Guzmán murió a los 67 años de edad.

SANGRE INDIA
Otro luchador que dejó de existir en el ring como Pedro Aguayo Junior, fue José Ramos Estrada, conocido como Sangre India.
Este luchador falleció el martes 25 de diciembre de 1979 en la Arena Coliseo. Recibió un castigo de César Curiel, un latigazo que lo lanzó fuera del cuadrilátero, y al caer se desnucó. Sangre India todavía se levantó, se agarró del ring, se resbala, cae y deja de existir. Originario de Michoacán, tenía 24 años de edad. Y apenas 6 dias antes había celebrado su cumpleaños.

APOLO CURIEL
Otra muerte trágica de la lucha, fue el deceso de Apolo Curiel, fallecido el 14 de julio de 1968. Curiel, nacido el 29 de diciembre de 1937 en Tantoyucan, Veracruz, fue a luchar a Guadalajara, y después del evento se fue a celebrar a un bar acompañado del también luchador español Manolo Pellman. Ahí se hizo de palabras con un policía de tránsito, el cual lo esperó a la salida del lugar, y lo mató de un balazo.
David Curiel Meléndez hizo estudios en la Normal de Maestros del DF.

ÁNGEL BLANCO
Otro estrella de la lucha libre mexicana que falleció trágicamente fue el Ángel Blanco. Él dejó de existir en un choque automovilístico en una carretera de Nuevo Laredo, Tamaulipas. En ese percance también iban Solar, Mano Negra, Jungla Negra y el Doctor Wagner, quien se tuvo que retirar por las lesiones sufridas.

EL ORO
También murió en el DF el luchador conocido como El Oro, el 26 de octubre de 1993. Jesús Hernández Silva era el nombre de este héroe del pancracio. Recibió en plena lucha una llave de su rival Kahoz, y a consecuencia de eso se golpeó la cabeza fuertemente contra la lona, lo que ocasionó su deceso. Murió rumbo a un hospital.
Esto sucedió en la Arena Coliseo.

ZICKA
Otro luchador que murió en pleno ring en una arena del DF fue Otón Van Zicka. Dejó de existir tras los golpes recibidos. Su nombre fue el de Jesús González Cruz, y murió en 1959. Era hermano de otro astro de la lucha, El Solitario.