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La selección nacional de Argentina, una de las eternas favoritas al título mundial, sufrió para conseguir su boleto a los cuartos de final. Fue en el segundo tiempo extra del duelo celebrado en la Arena Sao Paulo que la albiceleste venció 1-0, con gol de Angel di María, a su similar de Suiza.

Pese a que los argentinos tuvieron un par de llegadas y disparos al arco, principalmente en jugadas a balón parado; tuvieron que pasar 27 minutos de partido para que se generara una jugada de verdadero peligro, y fueron los suizos los encargados de elaborarla. Shaqiri sacó un disparo que exigió al arquero argentino apelar a sus reflejos para rechazar con el pie el balón que buscaba convertirse en el primer gol del encuentro.

Los argentinos también generaron un par de jugadas, en un partido que estaba muy trabado en el mediocampo y que impedía que las dos escuadras diseñaran jugadas peligrosas, por lo que ambas apostaban por la sorpresa, el contragolpe y la velocidad; sin embargo hubo algo que le impidió a Suiza, nuevamente, abrir el marcador. En una oportunidad inmejorable, Drmic corría con el balón, el guardameta Romero estaba adelantado, pero el futbolista europeo, en lugar de disparar al arco, lo mandó  directo a las manos del portero argentino.

La respuesta argentina no se hizo esperar, Messi llevó el esférico al área rival, pero el disparo de Di María, también culminó en las manos del guardameta Benaglio.

En el complemento, la situación fue completamente diferente, los suizos cedieron un poco la iniciativa a una Argentina que regresó al terreno de juego dispuesta a mostrar su poderío y vencer a Benaglio; siendo Gonzalo Higuaín el que estuvo más cerca de conseguirlo con un remate de cabeza que alcanzó a ser atajado por el guardameta europeo.

Messi tomó la responsabilidad de llevar el balón al área y buscar el gol que tanto se le había negado a los argentinos, el ’10’ sacó un disparo desde el centro que alcanzó a ser desviado por Benaglio, el principal obstáculo de la albiceleste para conseguir su objetivo.

El reloj marcaba el final del tiempo reglamentario, por lo que el partido se fue a tiempos extras, en los que la situación fue la misma, mucha lucha en el mediocampo, desbordes buscando el gol, pero el balón negándose a entrar en ninguno de los dos arcos.

Todo parecía indicar que el encuentro se definiría en la serie de los penales, pero en los últimos suspiros del segundo tiempo extra apareció la magia de Lionel Messi, quien hizo una gran jugada y dejó el balón a Ángel di María, quien remató con contundencia para darle a Argentina el boleto a los cuartos de final de la Copa del Mundo Brasil 2014.

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