POR ALFREDO MENDOZA CABALLERO
FOTOS: JORGE BARRERA ARCOS

CON la sencillez que lo caracteriza, Franco de Vita se presentó anoche en el Auditorio Nacional, que lució lleno de un público que esperaba ansioso el inicio del recital. Pasadas las veinte horas con treinta minutos, apareció el cantante venezolano en el escenario con una vestimenta sencilla pero acorde al evento. Acompañado de sus músicos y de dos fieles e inseparables seguidores, “su guitarra y su piano”, ofreció éxitos de su “Primera fila” y como era de esperarse, las canciones que lo han identificado y que también se han convertido en éxitos.
El cantautor inició con “Cántame”, luego prosiguió con “Que no muera la esperanza”, “Tú de qué vas”, “Cálido y frío”, “Cuando tus ojos me miran”, y algo verdaderamente maravilloso, de pronto apareció en el escenario la guapa María León, vocalista de Playa Limbo, para cantar “Tan sólo tú”. Este momento fue aclamado por los asistentes. Es importante mencionar que este dueto fue el inicio de más duplas, ya que a De Vita también lo acompañaron San Luis, unos paisanos suyos, para cantar “Si la vez”, así como el colombiano Gusi en “Ya lo había vivido”, pero faltaba una sorpresa más, el ex integrante de Camila, Samo, también se hizo presente en la canción “A medio vivir”.
Un detalle que sorprendió fue en las canciones “Te pienso sin querer” y “Y tú te vas”, ya que aparecieron en video Gloria Trevi y el ex académico Carlos Rivera respectivamente, ya que por compromisos laborales les fue imposible asistir a esta gran noche.
El artista agradecía constantemente a sus seguidores su presencia y en respuesta ofreció un popurrí tocando únicamente el piano y como era de esperarse, se creó una atmosfera única e indescriptible.
Al final del concierto, el público, exigente por cierto, pidió nuevamente la presencia del cantante, quien los complació para cerrar con broche de oro con las canciones íconos en su carrera: “No basta” y “Un buen perdedor”, despidiéndose con el aplauso que por más de dos minutos le regalaron los asistentes.