EFE

Pep Guardiola, entrenador del Bayern Múnich, no quiso descartar hoy que Arjen Robben, tras cinco semanas de baja, salga este martes como titular en la semifinal de la Copa de Alemania ante el Borussia Dortmund.

“Arjen no es un jugador que salga del banquillo, si está en forma jugará mañana desde el comienzo”, dijo Guardiola para responder a una pregunta acerca de si podía esperarse que jugase algunos minutos contra el Dortmund.

Robben regresó ayer a los entrenamientos con el grupo y se cuenta con él a más tardar en las semifinales de la Liga de Campeones contra el Barcelona.

“Arjen necesita poco tiempo para recuperar su condición y es muy fuerte aquí”, dijo Guardiola llevándose el dedo índice a la frente.

Guardiola admitió que en los últimos dos meses, cuando el Bayern llegó a tener convocatorias con sólo 13 jugadores debido a las lesiones, la ausencia de Robben fue una de las que más pesó.

“Arjen nos ha hecho falta, nos faltaba para resolver situaciones uno a uno en ataque”, dijo Guardiola.

Otro regreso ha sido el de Bastian Schweisteiger, que reapareció con un gol ante el Hertha Berlín.

El regreso de Schweinsteiger y el de Thiago hace que Guardiola tenga más posibilidades para armar el centro del campo y que probablemente se enfrente mañana al problema de tener que hacer un descarte.

“Bienvenido sea el problema, llevaba dos meses sin tenerlo porque tenía apenas jugadores para completar la alineación”, explicó.

Con respecto al partido de mañana, Guardiola dijo que será otra vez difícil e intenso como todos los enfrentamientos que ha tenido el Bayern contra el Dortmund de Jürgen Klopp.

“Hemos jugado seis o siete veces contra el Dortmund, hemos perdido y hemos ganado pero siempre han sido partidos de gran intensidad”, recordó.

El Dortmund, para Guardiola, pese a los problemas que tuvo en esta temporada en la Bundesliga, sigue siendo uno de los mejores equipos de Alemania.

El último enfrentamiento, que se saldó con una victoria por 1-0 para el Bayern, fue calificado por Guardiola como un paso clave para lograr el título de la Bundesliga de esta temporada, que quedó escriturado el fin de semana.

“Era un momento difícil, estábamos llenos de lesionados y si perdíamos el Wolfsburgo hubiera podido recortar la distancia a cuatro puntos y hubiéramos tenido una situación muy peligrosa”, dijo Guardiola.

“Tal vez fue uno de nuestros peores partidos, ganamos porque Thomas (Müller) y Lewy (Robert Lewandowski) tuvieron un momento perfecto”, dijo.