EFE

Joachim Löw, director técnico de la selección Alemania, semifinalista en esta Copa del Mundo Brasil 2014, aseguró que “la clave” para volver a la penúltima ronda por cuarta ocasión consecutiva es que Alemania “tiene excelentes jugadores”.

“El equipo ha ido cambiando desde 2006. Es bueno que el equipo no siempre tenga los mismos jugadores. La estabilidad es importante, pero hay que ir haciendo cambios. La única explicación a que volvamos a una semifinal es que tenemos unos jugadores excelentes”, dijo en la conferencia de prensa posterior al partido.

“Hemos ganado 28 de 31 partidos y eso es una actuación increíble. Eso demuestra que somos un equipo sólido, con buena actitud”, indicó.

Löw aseguró que Sudamérica y Centroamérica tienen cierta ventaja respecto a los europeos por las altas temperaturas que se están registrando en los estadios. “El clima está teniendo influencia. Sobre todo en los partidos que comienzan a la una. No es fácil para los europeos empezar un partido a esta hora de la tarde”, dijo.

“Hoy hacía mucho calor. No estamos acostumbrados. El próximo que empieza a las 5 no será igual. Con tanto calor, es fácil controlar durante todo el tiempo el partido y mantener el nivel de concentración, por eso se cometen errores. Pero creo que jugamos bastante bien”, afirmó.

El técnico reveló que situó a Philip Lahm como lateral porque Francia tiene un centro del campo demasiado fuerte y debía recurrir a abrir el juego por las bandas.

“Sabíamos cómo iba a jugar Francia y son tan fuertes que es difícil pasar a través del centro del campo. Por eso, coloqué a Lahm en el lateral derecho. A los jugadores no les sorprendió. Tenemos variantes tácticas con estos futbolistas y ante Francia precisábamos jugar por los laterales. Quise que apoyase a Thomas Müller”, desveló.

“Es lógico que Francia atacase más en el segundo tiempo, fue con todo porque no tenía nada que perder. Puso más jugadores en el ataque porque tenían que marcar y arriesgaron. Pero los contuvimos bien”, declaró Löw, que su principal preocupación es “recuperar a los jugadores” para una semifinal ante un rival “que seguro será extremadamente difícil”.