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13, mayo 2015 - 9:06

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POR ALEXIS GRIVAS
ENVIADO ESPECIAL DE OEM

CANNES, Francia.- El 68º. festival de Cannes, líder indiscutible de los certámenes cinematográficos internacionales, se inaugura hoy miércoles por la noche con una considerable novedad: La película que abre el festival es realizada por una mujer, francesa y actriz. Se trata de Emmanuelle Bercot, y su filme “Con la cabeza en alto”, donde aparece Catherine Deneuve; es la primera dirigida por una mujer que tiene el honor de abrir el certamen desde hace casi treinta años, desde 1987, cuando el festival se inauguró con otra película dirigida por una mujer también francesa, “Un hombre enamorado de Diane Kurys”.
Aunque la película de Bercot no está en competición, entre los cinco filmes franceses que sí compiten, dos son dirigidos por mujeres. Se trata de “Mi rey de Maiwenn” (premio del jurado aquí en 2011 con Polisse) y “Margarita y Julien”, realizada por otra actriz, Valerie Donzelli, quien se encuentra  por primera vez en competición después de su bien exitoso debut aquí en la sección paralela de la Semana de la Crítica con “Declaración de guerra” en 2011.
Sería esto una coincidencia o una indirecta respuesta del festival a las críticas de años anteriores por la escasa presencia de películas dirigidas por mujeres en la competición.
A notar a propósito la serie de lecturas y encuentros que bajo el título de “Mujeres en movimiento”, programada por el festival, pone en evidencia los logros  de las mujeres dentro del séptimo arte.
Del resto de los tres directores franceses en competición anotaremos el regreso de  Jacques Audiard (“Un profeta”, Gran Premio de Jurado en Cannes 2009) con su último filme “Dheepan”, mientras que otros nombres de talla de la industria francesa están seleccionados fuera de competencia: Robert Guediguian  con “Una historia de loco”, Gaspar Noe con “Amor” y Barbet Schroeder con “Amnesia”, acompañados nada menos que por Woody Allen con “Un hombre irracional”, el australiano de origen griego George Miller con la nueva entrega de su exitoso “Mad max” (“Camino de furia”) y la estrella norteamericana Natalie Portman  en su debut como realizadora con la producción israelita “Cuento de amor y oscuridad”.
Dos compatriotas suyos se encuentran seleccionados en competición. Se trata de Gus Van Sant con “El mar de árboles”. Sant es un habitual de este certamen donde en 2003 ganó la Palma de Oro y mejor director para “Elefante”. El segundo norteamericano en competición es Todd Hynes con “Carol”, interpretada por Cate Blanchet y Rooney Mara. Haynes regresa a Cannes donde fue premiado  en 1998 por “Velvet goldmine”.
Italia y Asia cuentan con una fuerte presencia en competición este año a través de directores de renombre.
Paolo Sorrentino, Oscar a la mejor película extranjera con “Belleza” en 2013, participa en la competición por sexta vez (Il Divo, premio del jurado en 2008) con “Juventud rodada”, en inglés, que cuenta con la actuación de Michael Caine y Harvey Keitel.
Nanni Moretti, otro habitual del festival, Palma de Oro para “El cuarto del hijo” en 2001 y mejor director para “Querido diario” en 1994, regresa también por sexta vez en la competición de Cannes con el semi-autobiográfico “Mi madre”. 
En cuanto a Matteo Garonne (galardonado dos veces aquí con el Gran Premio del Jurado por “Gomorrah” en 2008 y Realidad en 2012), regresa con “El cuento de todos los cuentos”, rodado igualmente en inglés con las actuaciones estelares de Salma Hayek y Vincent Cassel.
De Asia, dos venerados realizadores chinos están en competición. Se trata de Hou Hsiao-Sien (“El maestro de los muñecos”, premio del jurado en 1993) con “El asesino”, su séptimo filme en competición, y de Jia Zhang-Ke con “Las montanas pueden moverse”.
Jia Zhang-Ke, quien además es este año el objeto de un homenaje y  recipiente del prestigioso premio Carrosse d’Or en la sección  paralela, la Quincena de Realizadores, ganó aquí mejor guión por “Un toque de pecado” en 2013.
Por su lado, el japonés Kore-Eda Hirokazu regresa a la competición con “Nuestra pequeña hermana”, de temática similar a su anterior  “Tales padres, tales hijos” que recibió aquí el premio del jurado en 2013.
A lado de estos asiduos de Cannes la competición compuesta de 19 películas -contra 18 el año pasado- da cabida esta vez a un número de jóvenes y nuevos realizadores.
Notables son entre ellos los casos, del húngaro Laszlo Nemes, ex asistente de su celebre compatriota Bela Tarr, y quien compite con  “El hijo de Saúl”,  siendo este el único primer filme en competición este año; del canadiense Denis Villeuneve (“Politécnico”, 2009; “Incendios”, 2010; “Prisoneros”, 2013), quien presenta “Sicario”, que tiene temática mexicana (los carteles de narcos) y donde actúan Benicio del Toro, Emily Blunt y Josh Brolin; del noruego Joachim Trier ( “Oslo, August 31”, Un Certain Regard 2011) con su “Mas fuerte que las bombas”, que cuenta con la actuación de Isabelle Huppert, del australiano Justin Kurzel con su adaptación de Macbeth con la actuación de Marion Cottilard y Michael Fassbender; del griego Yorgos Lanthimos, quien trae en competición “La langosta”, con la actuación de Colin Farell, Rachel Weisz y Lea Seydoux después de haber ganado aquí en 2009 el Gran Premio de la sección  Un Certain Regard por “Canino” (“Dogtooth”), y por supuesto, del joven mexicano Michel Franco, quien con el anglófono “Chronic”, que cuenta con la actuación de Tim Roth,  pasa ya a las ligas mayores de este festival, donde empezó con  “Daniel y Ana”  en la Quincena de Realizadores en 2009, siguiendo con “Después de Lucia”, premiado con el Gran Premio de Un Certain Regard en 2012.
El jurado internacional que será llamado a  otorgar la codiciada Palma de Oro y el resto de los premios a las películas en competición durante la función de gala de clausura el domingo 24 del mes está compuesto en esta ocasión por: Los hermanos realizadores Joel y Ethan Coen, Estados Unidos, como presidentes; Guillermo del Toro, realizador, México; Xavier Dolan, realizador, Canada; Rossy de Palma, actriz, España; Sophie Marceau, actriz, Francia; Sienna Miller, actriz, Reino Unido; Jake Gyllenhaal, actor, Estados Unidos, y Rokia Traore, compositor, Malí.
Un gran número de prestigiosos intérpretes del cine mundial que encabezan los repartos de las películas en competición, además de otras en el resto de las secciones, estará presentes en el tapete rojo del palacio del festival, dando inicio al gran cortejo de estrellas que se esperan en la Croisette, el famoso boulevard de la Costa Azul que borda el festival.
Están previstas, entre otras: Marion Cotillard, Salma Hayek, Isabelle Huppert, Cathetine Deneuve, Cate Blanchet, Rooney Mara, Lea Seydoux, Rachel Weisz, Natalie Portman, Charlize Theron,  Emma Stone, Jane Fonda, Adele Exarchopoulos, Emily Blunt, Diane Kruger, Michael Fassbender, Tim Roth, Gerard Depardieu, Michael Caine, Harvey Keitel, Colin Farrel, Joaquin Phoenix, Tom Hardy, Vincent Cassel, Vincent Lindon, Mathias Schoenaerts, Tahar Rahim, Matthew McConaughey, Benicio del Toro y Josh Brolin,   
Además de “Chronic”, la presencia mexicana este año en Cannes incluye  el estreno de la coproducción mexicano/chilena “Allende mi abuelo Allende”, largometraje de género documental sobre el ex presidente, primera obra de su nieta Marcia Tambutti seleccionada en la Quincena de Realizadores; y la presentación de “Las elegidas”, segundo filme del realizador David Pablos (“La vida después”, 2013) adaptada de la novela de Jorge Volpi, seleccionado en la sección oficial Un Certain Regard.
La industria mexicana está asociada además a través de sendas iniciativas al Mercado del filme, las que trataremos más a fondo a lo largo de estas corresponsalías.
Anotaremos que la presencia de cine latinoamericano  en todas las secciones se limita a siete largometrajes. Aunque esto representa más del doble del año anterior -tres películas-, uno no puede dejar de pensar que las cinematografías del continente están representadas de manera dispareja aquí, contrastando con lo que pasa con el igualmente prestigioso festival de Berlín, en el que el cine latinoamericano está abundantemente presente y premiado año tras año.
“Chronic” de Michel Franco es la única película latinoamericana en competencia, a la vez que México y Colombia encabezan la lista con tres películas seleccionadas por cada país.
De México, las ya mencionadas “Chronic”, “Las elegidas” y “Allende”.
De Colombia, “Alías María” de José Luis Rugeles, seleccionada en Un Certain Regard; “El abrazo de la serpiente” de Ciro Guerra (“Los viajes del viento”, 2009), que se presenta en la Quincena de Realizadores, y “La tierra y la sombra” de César Augusto Acevedo, que estará en la Semana de la Crítica (SIC).
Argentina contribuye con sólo un largo, “Paulina” (“Patota”), dirigido por Santiago Mitre (“El estudiante”, Premio especial del jurado en Locarno 2011) presentado en la SIC,  mientras que países como Brasil, Cuba y Uruguay están totalmente ausentes de la selección de este año.
Si América Latina podría quejarse por la limitada presencia de sus producciones en las varias secciones del certamen, los casos de Alemania y del Reino Unido son aún más graves: Ningún largometraje en sección alguna para la primera y solamente coproducciones dirigidas por realizadores  extranjeros para el segundo: “Carol” del norteamericano Todd Haynes, “La langosta” del griego Yorgos Lanthimos, “Macbeth” del australiano Justin Kurzel, “El cuento de todos los cuentos” del italiano Matteo Garrone y “Juventud” de su compatriota Paolo Sorrentino.
La sección oficial Un Certain Regard, donde se presenta “Las elegidas”, cuenta este año con 19 estrenos -contra 20 en 2014- y se inaugura con “An”, de la japonesa Naomi Kawase, cámara de Oro aquí en 1997 por Suzaku y cuatro veces desde aquel entonces seleccionada en competición.
Kawase encabeza en esta sección igual que en la competición una fuerte presencia del cine asiático: Su compatriota Kiyoshi Kurosawa presenta “Viaje a la costa”, el tailandés Apitchatpong Weerasethakul (Palma de Oro en 2010 por su Tio Bonmee, quien puede recordar sus vidas pasadas) trae “Cementerio de esplendor”, el filipino Brillante Mendoza presenta “Taklub”, regresando a este festival donde ganó mejor director en 2009 por Kinatay, el coreano Shin Su-Won estrena “Madonna” mientras que su compatriota Oh Seung-euk tiene seleccionado “El sin pudor” y el también coreano Wong-chan hace su debut con “Office”.
Otra destacable presencia en esta sección es aquella del cine rumano, uno de los más a la vista desde tiempo ya en Europa, a través de “El Tesoro” de Corneliu Poromboiu (Cámara de Oro aquí en 2006 por su debut “12:08 Al este de Bucarest”, seleccionado en la Quincena de Realizadores y El Gran Premio de Un Certain Regard en 2009 por “Police adjetivo”), y “El piso de abajo” de Radu Muntean, quien regresa a esta sección donde en 2010 presentó “Martes después de Navidad”.
Dos películas  indias se encuentran también seleccionadas en esta sección donde se estrena por primera vez en selección oficial en este festival una película etiope, “Cordero”, primera obra de Yared Zeleke. Otra primera obra en esta sección precedida de elogiosos comentarios es la islandesa “Carneros de Grimur Hakonarson”. También la iraní “Nahid” dirigida por Ida Panahandeh.
De las prestigiosas secciones paralelas, en la Quincena de los Realizadores, entre los 17 títulos de su programación -contra 19 el año anterior-, seleccionados por el prestigioso crítico francés Edouard Waintrop en su cuarto año ya  al frente de esta sección, las más esperadas son: “Noches de Arabia”, donde el conocido realizador portugués Miguel Gomes (“Nuestro querido mes de Agosto”, 2008) aporta su versión de Miles y una noches a lo largo de 6 horas y media de duración. El todo nuevo “Testamento”, una sátira religiosa dirigida por el belga Jaco van Dormael (“Toto el héroe”, Cámara de Oro en Cannes 1991, El nadie primado en Venecia y en los European Film Awards en 2009); “El día de mañana”, un drama existencial, primer filme del sueco Magnus von Horn; “Mustang”, de la debutante realizadora turca Denis Gamez Erguven; “Paz con nosotros en nuestros sueños” del lituano Aharunas Bartas (Libertad premiado en Venecia en 2000 y “El pasillo”, premio Fipresci en Viennale en 1995); “Canciones que mis hermanos me aprendieron”, primer filme de la norteamericana de origen chino Chloe Zhao; “Un día perfecto”, con el que el talentoso realizador y guionista español Fernando León de Aranoa (“Lunes al sol” con la actuación de Javier Bardem, Concha de Oro en San Sebastián 2002) trae a la Quincena un drama de guerra en los Balcanes con las actuaciones estelares de Benicio del Toro, Tim Robbins y Olga Kurylenco.
La película de abertura de la Quincena es “En la sombra de las mujeres” del francés Philippe Garrel, quien con este su 25avo filme regresa en la Quincena después de haber rechazado la propuesta de ser seleccionado en Un Certain Regard.
En la Semana de la Critica (SIC), de su programación reservada a primeras y segundas obras compuesta de  11 títulos seleccionados por su nuevo jefe Charles Tesson, quien también repite por cuarto año, aparte de las ya mencionadas “Paulina” (La Patota) del argentino Santiago Mitre y “La tierra y la sombra” del colombiano Augusto César Acevedo parecen ser muy prometedoras. Las siguiente películas, “Krisha”, primera obra del norteamericano Trey Edward Shults, sobre una norteamericana de edad media quien trata de reconectar con su familia; “Mediterránea”, primer filme del italonorteamericano Jonas Carpignano sobre el candente tema de los refugiados ilegales africanos y asiáticos, quienes arriesgando sus vidas llegan masivamente a bordo de embarcaciones de fortuna a las costas  de los países de la Unión Europea (Grecia, Italia, Malta) en busca de asilo; “Los anarquistas”, segundo filme del francés Elie Wajeman con las actuaciones de Adele Exarchopoulos (premio de actuación  ex aequo con Lea Seydoux en Cannes 2013 en “La vida de Adele” -Palma de Oro- de Abdellatif Kechiche) y Tahar Rahim (revelado aquí en Profeta de Jacques Audiard en 2009, nominado al Oscar por la mejor película extranjera el mismo año, mejor actor en los European Films Awards 2009 y visto últimamente en The Cut de Fatih Akin), y “Deteriorado” (“Degrade”), de los hermanos debutantes palestinos Arab y Tarzan Nasser, una tragicomedia sobre un grupo de palestinas atrapadas por la guerra en un salón de belleza en Gaza.
Entre el resto de la programación de la SIC figura una subsección de 10 medio y cortometrajes cuyos realizadores están invitados a participar en el programa “Next step” (“El paso siguiente”) creado por la SIC y que los asesora a lo largo de la preparación de su primer largometraje.
Finalmente, en la programación de la SIC también figura la ya tradicional presentación, en colaboración con el festival de Morelia,  de una selección de cortos mexicanos estrenados en aquel evento.
Mención aparte merece este año la programación de la  sección Cannes Classics donde paralelamente a la presentación de un gran número de títulos clásicos restaurados,  se rinden  entre otros sendos homenajes acompañados por emblemáticas películas  a Ingrid Bergman -su foto domina además el póster oficial del festival-, Agnes Varda, Costa Gavras -invitado de honor este año aquí-, al recién desaparecido gran maestro portugués Manoel de Oliveira, a los 100 años de Orson Welles y a los 120 años de los precursores de cine, los hermanos Lumiere.
Resumiendo las actividades y lo programas de la 68ava edición del certamen  anotaremos que este es el primer festival bajo la presidencia de Pierre Lescure, un influyente y respetable  personaje del mundo de los medios audiovisuales.
Lescure sustituye en el puesto el venerable crítico cinematográfico, escritor y cineasta Gilles Jacob, quien ha dirigido Cannes desde 1978 hasta 2014.
Jacob merece todo el respeto y agradecimiento de la comunidad cinematográfica internacional  por haber logrado a lo largo de estos 37 años renovar el perfil del festival y afianzarlo a la cabeza de los eventos de su genero a nivel mundial a raíz por un lado de una  sabia  programación donde el cine de autor y de vanguardia se combinaba con el cine de calidad y aquel de carácter más comercial dirigido a  un amplio público y por otro lado a través de la creación de nuevas formas de acción, destacando entre ellas la Cinefondation.
Se espera ver qué cambios podría aportar a corto y largo plazo este relevo, ya que el futuro perfil del festival dependerá igual de la colaboración y de los equilibrios que se establecerán entre el nuevo presidente y  el dinámico delegado general-director artístico Thierry Fremaux, quien sigue en su puesto.
Jacob no se alejará del todo del festival, ya que seguirá como presidente honorario y a la cabeza de la prestigiosa Cinefondation creada por él hace 18 años, siendo esta última la sección donde año tras año un grupo selecto de nuevos cineastas de todo el mundo -unos mexicanos entre ellos- tiene la ocasión de residir durante unos meses en París con todos los gastos pagados para preparar su próximo proyecto fílmico aprovechando de asesorías de distinguidas personalidades de cine.