POR FERNANDO SCHWARTZ

UNO de los cruzazulinos más recalcitrantes es el goleador Carlos Hermosillo. No le gustó para nada la contratación de Sergio Bueno y así lo externó en un día donde fue requerido por cualquier cantidad de medios: “No me meto con la persona. Amo a la institución. Tengo impotencia, quiero llorar”.

Es claro: “Siguen engañando en Cruz Azul a su afición. Es difícil dar palabras. Lo he dicho en corto, nunca le dejaré de ir al Cruz Azul, pero me separaré de ir al estadio y ver la televisión. Ojalá que este sentimiento que tengo, no buscando nada, sólo que Cruz Azul con los mismos directivos que han hundido a la institución se den cuenta lo que vale”.

Enfático: “Es una pasión, amor, se lleva en la sangre. Equipo al que siempre le fui y pude representar. Sin hacer dramas. Me siento mal. No traicionado porque soy un aficionado más. Uno más que trae bien tatuados los colores azules”.

Categórico: “Al licenciado le gusta tener títeres. No le gusta delegar. Por qué no dirige él. Hombre brillante en la cementera. El equipo es de todos, es de la Cooperativa. Lamento todo lo que está pasando”.

Ratificó: “No había técnico, y ya se tenía planeada pretemporada, jugadores. Todo planeado. Lo sueltan de a poco para hacer creer que es ya con el técnico. Últimamente han contratado primero jugadores y luego al técnico”.

Y finalizó: “No tiene personalidad. Lo digo con respeto a Sergio Bueno. Él hace lo que le corresponde. Siempre lo mismo. Falta carácter. Hay muchos jugadores tibios, sin el perfil para estar ahí”.