DUNEDIN, Nueva Zelanda.- La joyería que México presumió para el Mundial Sub-20 jamás apareció. Las circunstancias los mantuvo vivos hasta el último encuentro, aunque ante los serbios terminaron por demostrar las carencias del cuadro de Sergio Almaguer y terminó por exhibirlo, pese a lo poco holgado del marcado, 2-0.
El retroceso es claro, pues después de avanzar a la siguiente ronda en las dos ediciones anteriores, México no mostró a aquellos jóvenes que brillan semana a semana en la Liga MX. Ni “Chucky” Lozano, Érick Gutiérrez, Érick Aguirre o el propio Orbelín Pineda pudieron poner en la cancha la calidad que muestran en sus equipos.
No hay otra palabra que describa a una generación que prometió y se quedó en eso más que: ¡Fracasote!

EL JUEGO
Ni acomodados se veían los tricolores, cuando Serbia pegó.
Una distracción en el primer saque de banda del encuentro fue letal para el Tricolor. Milinkovic alargó, sin piedad Maksimovic la mandó al fondo de la red.
México se tambaleó, no supo responder al certero golpe de los europeos. La falta de unión entre volantes y delanteros se notó. Sin mucha idea, el Tricolor tuvo la primera, Aguirre desbordó por toda la banda, Érick sacó el centro que terminó en la cabeza de Zdjelar. Los de Almaguer reaccionaron tenuemente, Gutiérrez buscó con disparo, Lozano con su velocidad y Martínez con su altura, siempre sin suerte, pues la defensa serbia se multiplicó en todo momento.
Cuando México vivió sus mejores momentos, Serbia supo aprovechar las pelotas paradas. En tiro de esquina Zivkovic estuvo cerca d vencer a González. El anuncio fue claro y los europeos en la segunda no fallaron. Dudosa falta de Guzmán en tres cuartos de terreno, le abrió la oportunidad de tiro libre a los balcánicos, Zivkovic metió chanflazo impresionante que se incrustó en la meta mexicana. ¡Golazo de Serbia!
Fortísimo impacto recibió México, cabizbajos, los jugadores se fueron al descanso, una osadía era necesaria.

ADIÓS
Almaguer se desesperó y sin pensarlo mandó dos cambios de un mismo jalón.
El “Güero” Díaz y Luis Márquez entraron al quite, Memo Martínez y Orbelín Pineda se quedaron en el vestuario. El parado no cambió, pero el “Chucky” Lozano acompañaría a Díaz en la delantera, ni así surgió el peligro.
Paunovic no respondió a los movimientos del técnico azteca, al contrario, decidió darle orden a su equipo, aguantó y sus jugadores respondieron en el césped.
Las llegadas europeas comenzaron a preocupar a González, Mandic tuvo la primera, después Milinkovic y por último Zivkovic, el meta mexicano atajó todo.
Más con corazón que con futbol, el Tri reaccionó. Tal vez por el ingreso de Laínez, pero México fue al ataque. Díaz prendió una que fue al palo y Gutiérrez cruzó mucho su disparo, las ideas se acabaron.
No hubo para más, el Tricolor regresará antes de lo planeado, un rotundo fracaso de los del Almaguer.