CAÍN Velásquez, el campeón mundial pesado de la UFC, contestó el alud de preguntas lo mismo en perfecto español que en inglés. Varias veces se le interrogó ayer, durante la conferencia de prensa previa a su encuentro de mañana contra Fabricio Werdum en la Arena Ciudad de México, sobre las palabras del brasileño, quien ha resaltado una y otra vez que Caín no es mexicano, que es norteamericano, ya que nació en California.
Caín hablaba calmado y de muy buen humor:
“Los insultos de Fabricio no me inquietan. Es más, no lo tomo ni como insulto, simplemente es su táctica, pero no me va a sacar de balance. Ha hablado mucho, pero yo tengo años en esto, como para enojarme. Él y yo somos profesionales, y vamos a dar un gran encuentro, La idea es salir a acabar pronto, no esperar la decisión. No necesito declaraciones así para calentarme. Y mira, Fabricio no es mi amigo, pero me cae bien.
“Una cosa es segura, las palabras no ganan peleas.
“Estoy seguro de que la gente va a estar conmigo, porque soy mexicano, así Fabricio diga otra cosa. Tengo raíces, sangre mexicana. Yo sé bien de donde soy, sí, nací en California, pero me siento de aquí”.
Para poner un ejemplo, Caín expresó que lo arropó el lleno que hubo en el Museo Interactivo de Economía (Tacuba 17), en donde entrenó la tarde del miércoles pasado, y decenas de fans lo aclamaron ruidosamente.
Negó que haya pique entre Fabricio y él. “Después del combate nos daremos la mano, y que gane el mejor. Y si hay revancha en Las Vegas como se afirma, pues la aceptamos, cómo no.
“Tampoco me asusta la altura de la capital. Tengo tres semanas trabajando en México, y sé que voy a pelear en plenitud. La lesión que tuve es cosa del pasado. La inactividad que he tenido por la lesión, dos años, no creo que me afecte, pero eso lo verá el público el sábado.
“En la Arena México van a ver al mejor Caín Velásquez, en plenitud, y desde luego, sí va a ser una ventaja que el público va a estar de mi lado, eso me va a motivar más”. (Castellanos; Foto: Montalvo)