POR GUILLERMO MARTÍNEZ G.

DECEPCIÓN y hermetismo existe en la familia del remo, al saber que los competidores nacionales se enfrentarán a monstruos de Canadá, Estados Unidos, Brasil, Venezuela o Colombia, en los Juegos Panamericanos sin posibilidades de alcanzar el podio.
Tal es el caso del señor Luis Pérez-Rul, papá de Lila quien ganara el oro en el bote doble al lado de Analicia Ramírez en Guadalajara.
“Hay mucha tristeza al saber que las autoridades deportivas andan anunciando que México se puede conformar con un quinto lugar en Toronto, cuando somos más de 120 millones de seres donde se podría buscar a los mejores exponentes para que se lograra una mejor actuación. Esto es mediocridad y no se vale para un deporte tan bello, técnico y competitivo como lo es el remo”.
Luis hizo alusión a que se le está apostando a la remera Kenia Lechuga a que logre una medalla.
“Cuando apenas es una niña que nunca ha estado en este tipo de encuentros. Lo digo porque esta chica se merece un gran respeto por su clasificación a Panamericanos, pero que no le quieran apuntar una medalla cuando no tiene los elementos suficientes ni sabe de los competidores que estarán en la justa”.
Todo esto lo relaciona con los malos manejos que hasta el momento ha tenido la federación entre demandas de deportistas, firmas falsas de parte de su presidente Pedro Cuervo, además de que un chico que está suspendido por dos años por dopaje, sea el que haga las evaluaciones en las tomas de tiempo que se han llevado a cabo en la pista de Cuemanco.
“México está en retroceso con todo esto, y es una gran pena porque desde ya se está dando por perdida una gran generación de remeros que sí lograron medallas internacionales. Me pregunto como justificarán el fracaso que se avecina. Es una federación sin lineamientos, sin un perfil de ganadores. Lila y Analicia alcanzaron oro en Guadalajara, y creen que lo podrán superar las chicas que tomarán ahora este bote. No es posible tanta vergüenza. Y no nada más en el remo, sino que hay otros deportes que también andan igual”.
Para el papá de la mejor remera hasta el momento que existe por el país y que no estará en los Panamericanos, es una incoherencia lo que está pasando.
“Nuestro país está dormido. La federación no le presta botes a los remeros porque los alquilan para sus negocios, sin saber que estamos en un pueblo de gran cultura deportiva. Deberían saber los Senadores o Diputados lo que está realmente pasando para que pongan un alto y exijan cuentas a las federaciones. Sólo salvo una sorpresa algún remero se podrá colar al podio, pero lo vemos difícil quienes hemos visto a esta disciplina caer en manos de gente inexperta y con otros intereses, que no sea la competitividad internacional”.