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15, julio 2015 - 11:00

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EL estadio Olímpico Universitario vivió un día como hoy, pero hace 30 años, en 1985, el despegue de la carrera más exitosa de un futbolista mexicano a nivel internacional: La de Hugo Sánchez Márquez con el Real Madrid de España. Después de pasar cuatro temporadas con el Atlético, en la última salió campeón de goleo y se llevó su primer “Pichichi”; el cuadro Merengue, encabezado por su presidente, Ramón Mendoza, se impuso como objetivo el fichar sí o sí al “Niño de oro”.
Y para lograr el traspaso entre los eternos rivales de la capital española, fue necesario maquillar la transacción y se utilizó como puente a los Pumas de la Universidad, equipo en el que Hugo inició su carrera profesional.

Y ASÍ SE DIO LA BRILLANTE CONTRATACIÓN
Mendoza acababa de ser nombrado presidente del Real Madrid. Después de ver la categoría y contundencia de Sánchez Márquez, le echó el ojo y se impuso como objetivo, el fichar al ariete mexicano de cualquier forma.
Para eso, trató de negociar con el cuadro Colchonero y puso 150 millones de pesetas sobre la mesa y agregó a los jugadores Ochotorena y Lozano. El Atlético rechazó tajantemente la jugosa oferta, pero había un gran detalle. El “Penta” terminaba contrato con el cuadro rojiblanco en junio de 1986, y quedaría libre. Eso dio pie a que negociaran, ya que Vicente Calderón, presidente del Atleti, tuvo miedo de que Hugo se fuera gratis después de un año.
Sin embargo, había algo más de peso: le asustaba más la reacción de los aficionados rojiblancos, que al ver que pactaba con el cuadro enemigo, le dieran la espalda y dejaran de ser socios del club, pues sólo tenía 15 mil.
El Barcelona también quiso entrometerse y Joan Gaspart, vicepresidente de esta escuadra, charló con Hugo para que fuera blaugrana, ofreciéndole cinco años de contrato a 50 millones por temporada.
Mendoza se pone nervioso ante la posibilidad del Barça y el 10 de mayo se reúne con Calderón y con Hugo. Cenan juntos en el restaurante Viejo Madrid, en la Cava Baja. Ahí Hugo les fue claro y conciso: No aceptaría por nada al Barça, pues su intención era la de jugar en el Real, nada más.

PUENTE UNIVERSITARIO
Entonces, la mejor salida para todos fue el ‘traspaso puente’ entre el Atlético, Pumas y Real Madrid. El 4 de julio, el Atlético traspasó a Hugo Sánchez a los Pumas. Recibió 200 millones de pesetas en dólares en un talón del Banco Credit Commercial de France.
El 12 de julio, Mendoza viaja a México con escala en Nueva York. Y el 15 de julio de 1985, en el Estadio Olímpico Universitario, Hugo Sánchez Márquez firma el contrato que lo liga con el Real Madrid, 250 millones de pesetas de por medio. Y todos contentos, pues Calderón quedó bien con sus seguidores y el Real tuvo a la joya mexicana, la cual brilló de sobremanera de principio a fin. El colofón de esta historia se escribió el 19 de julio, cuando Hugo fue presentado en el Bernabéu, junto a Maceda y Gordillo, ante 50 mil espectadores.
El delantero azteca debutó con el Real el 1 de septiembre de 1985 ante el Betis en partido celebrado en Sevilla y resultó un tanto agridulce, pues aunque marcó su primer gol como merengue, y ayudó a la victoria 2-1, fue expulsado por protestar al árbitro Urizar Azplitarte.