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25, julio 2015 - 23:21

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POR OMAR PÉREZ DÍAZ
FOTOS: JUAN RAMOS

PACHUCA, Hidalgo.- Pachuca entró al Torneo Apertura 2015 como quería.
Ganó 2-1 a Tijuana con una buena actuación de su cuadro, incluyendo a sus refuerzos, ante su gente, que hizo una estupenda entrada en el Estadio Hidalgo.
El ahora mexicano Ariel Nahuelpán y el uruguayo Jonathan Urretaviscaya le pusieron ambiente a la fiesta blanquiazul con los goles, rematando la esforzada labor de sus compañeros.
Xolos descontó por la vía penal de Felipe Flores, pero fue pobre la producción de los fronterizos, que necesitan mucho mejores cosas para dar pelea en este campeonato.
En números, las huestes de Diego Alonso tienen sus primeros 3 puntos; Romano y compañía deben esperar.

SUPERIORIDAD LOCAL
Los de casa fueron trabajando su resultado desde la primera mitad, con aplicación y un costado izquierdo que hizo estragos a Tijuana.
En la zurda de Botta, Olvera y Gutiérrez cifró el Pachuca su dominio de entrada, rubricado por el gol de Ariel Nahuelpán.
Hasta ese punto, Xolos no daba réplica. Los pupilos de Romano se vieron lentos con comparación a la propuesta blanquiazul, que manejó a placer la pelota en todo ese momento, acercándose constantemente al arco de Vilar.
La ventaja afianzó a los Tuzos, que probaron con Lozano, Botta y Nahuelpán, quien ya juega como mexicano, disparando sobre el arco visitante. Faltó puntería para plasmar la amplia diferencia que se veía en la cancha.
Xolos, tibio, casi siempre correteando la de gajos, no tuvo gas ni ideas para responder más allá de un mano a mano que el venerable ‘Conejo’ Pérez atajó. Poco más se supo de los canes.
Así, al descanso, la mínima ventaja sabía a poco para Pachuca.
Tijuana no mejoró en el complemento con la salida de Moreno y el ingreso de Cárdenas, con la intención de Romano por controlar la pelota.
Hasta que apareció el talento de Leiton Jiménez para hacerle un sombrerito a Mosquera en el área; el colombiano, superado, se tiró a sus pies y lo derribó, cometiendo penal. Felipe Flores cobró magistralmente y la contienda se empataba 1-1 al minuto 62.
Pachuca, que había ido sobrellevando el partido, se vio orillado a poner armas de otro calibre. Entraron Penilla y Urretaviscaya para tumbar el cerrojo que pretendía formar Xolos.
En el enésimo error rojo para tratar de salir, el ‘Chucky’ Lozano se fue sobre el arco y cedió a Nahuelpán, que sin ángulo y con Vilar precipitado, pateó un centro que Urretaviscaya cazó para empujarla a gol. Nuevamente los Tuzos estaban adelante y ya no soltarían la ventaja.
Porque era un conjunto más redondeado, en comparación a Xolos, corto en aquello de la creación y la fuerza ofensiva. Mal inicio canino.
Pachuca, todo lo contrario. Nada como la victoria.