De diez

SANDY, UTAH.-Un giro total es el que existe en esta Selección Nacional, pese a contar con la base que se consagró en la Copa Oro, quienes arropan a los que no tuvieron éxito en la Copa América y ven el debut de Henry Martín.

Un ambiente de diez, de risas y exigencias fue la vivida en el entrenamiento previo al choque contra Trinidad y Tobago en donde el combinado mexicano reconoció a temprana hora la cancha del Real Salt Lake, el Río Tinto de la ciudad de Sandy.

El combinado mexicano tuvo que atravesar media ciudad de Salt Lake para llegar a Sandy y conocer la cancha del equipo de la MLS, club de donde precisamente emergió el juvenil rojiblanco, Carlos Salcedo.

Una práctica de casi una hora y media fue la realizada por el “Tuca” y compañía. Con acceso a los medios en los últimos quince minutos, México se olvidó de las tradicionales selfies de la peculiar era del “Piojo” para centrarse en cada una de las instrucciones de Ferretti.

Tranquilo y sin explotar, el entrenador detalló lo que quería en cada jugada y movimiento, una y otra vez describió los movimientos. Manoteó un poco y sucesivamente se prendió en ánimos.

Diego Reyes, Raúl Jiménez, Henry Martín y Miguel Layún fueron los más aleccionados, les pidió tener la mejor puntería con diestra y zurda, y solamente el Tuca era el pasador. En la meta, Talavera y Muñoz aguantaron los fogonazos.

Con el tiempo y los errores, Ferretti no aguantó más equivocaciones y encendió las exigencias, que fueron acompañadas de leves gritos, el primero y único en escucharlas desde cerca fue Diego Reyes, quien solamente agachó la cabeza, cerró los ojos y no entendió su mal tino.

Una y otra vez continuó el ejercicio, y nuevamente Ferretti arremetió contra el juvenil del Porto, en tanto que a Jiménez y Martín simplemente los dejaba, no los corregía y escuchaban los regaños.

Esto después de una práctica que no contó con “Maza” Rodríguez, quien fue a las pruebas médicas,  “Chicharo” aún sin llegar a Utah y la baja de “Tecatito”, quien no hizo el viaje. Sin embargo, las risas y el buen ambiente imperaron en un interescuadras en donde Moi Muñoz la hizo de delantero, Vela de defensa central, y Jiménez y Paúl Aguilar de porteros, en lo que más que reinó fue el gran ánimo. (Luis García Olivo/ Foto: Jorge Barrera/Enviados Especiales)