Barriles de pólvora

De los cuatro equipos que sólo llevan un punto deberá salir el primer técnico cesado del Apertura 2019, aunque son más los técnicos que deben estar nerviosos, porque los resultados que han tenido no son los esperados.

Veracruz es último en todo y no creo que se pueda recuperar el domingo en CU, porque Míchel lleva dos derrotas seguidas, un tropiezo en casa sería catastrófico para su proyecto y es muy temprano para que conozca el enojo de la afición universitaria cuando ve que las cosas no van bien. Así que los tres puntos deberán quedarse en la capital y Meza continuará en las aguas más profundas junto a sus Tiburones Rojos.

Otro que tiene todo en contra es La Volpe, luego de perder en casa frente al América. El “Bigotón” está preocupado y se espera que su reacción sea inmediata, aunque la próxima jornada tiene una salida peligrosísima para pronosticar una nueva derrota, ahora en la cancha de Rayados. Ni cómo ayudarlo. La directiva ya debe estar pensando qué hacer al respecto.

Al Puebla le viene un partido durísimo en casa, al abrir la fecha cinco el próximo viernes en un duelo de desesperados frente al Pachuca. Ahí podría ser que tanto el “Chelís” como Martín Palermo se estén jugando la chamba. El que pierda debería irse, pero en el caso del Puebla es difícil encontrar otro técnico, mientras que para el argentino esta es una gran oportunidad para empezar a reaccionar. Ya si no le gana al Puebla, la directiva del Grupo Pachuca entenderá que con Palermo tampoco hay mucho futuro.

Finalmente están los dos equipos que recién se han estrenado en la Liga MX, como Atlético de San Luis y Bravos. Alfonso Sosa y Gabriel Caballero recibieron el apoyo de sus dirigentes al tener continuidad en el máximo circuito, pero están en otro nivel de competencia en el que no han podido demostrar su capacidad. Serán latentes candidatos al cese. Incluso ya ha sonado Torrente, técnico de Monarcas, y hasta Caixinha y Diego Alonso. Es decir, hay 19 barriles de pólvora y el primero no tardará en estallar.