No habrá Clásico esta noche, pero qué importa ahorita. No es momento para pensar que la fiesta del futbol nos hace falta. Cierto que se trataba de un partido esperado, hasta quedó marcado en los calendarios desde el mismo momento que la Liga MX dio a los días en los que se disputaban todas las jornadas del Apertura 2017. Siempre el América–Chivas es el primero en llamar la atención, aunque también hay otros duelos que despiertan gran interés.

Ambos equipos tenían una cita para esta noche. Las Águilas, mucho mejor ubicadas que el actual campeón del futbol mexicano. El equipo del “Piojo” Herrera marcha segundo de la tabla, mientras que el Rebaño ya empezó a levantar y se encuentra en la posición número 12. Ya veremos cómo llegan cuando tengan que medirse en octubre.

Almeyda ya empieza a ver una recuperación en su equipo y las Chivas llevan prisa por seguir sumando puntos. Con nueve puntos en nueve fechas, los rojiblancos sabían que con un triunfo frente al América se colocaban a un pasito de la zona de Liguilla, pero lo más importante iba a ser en envión anímico en caso de ganar. El chip tuvo que cambiar de inmediato porque ahora, en lugar de visitar el nido las Águilas recibirán a los Lobos BUAP.

Totalmente de acuerdo en la reprogramación de la décima fecha del campeonato, en lo que no estoy de acuerdo es en que se dispute la jornada 11 a mitad de semana y menos si los partidos son por la noche. Creo que la seguridad es primero y los efectos del temblor están muy recientes. Algunas dudas deben tener al respecto porque en la página de la Federación desaparecieron los horarios de cada juego.

Sobre este tema del terremoto, siguen las manifestaciones de apoyo y solidaridad. Los jugadores de la Liga MX no dejan de acudir a los centros de acopio para contribuir con las cosas que se están necesitando. Por ejemplo, en la conferencia de prensa que ofreció ayer Gerardo Alcoba, defensa de los Pumas, el tema fue más la ayuda que se ha visto y de la cual quedó sorprendido el propio jugador.

Así es México, un país solidario que nunca baja los brazos. Es un pueblo de trabajo, esfuerzo, de entrega total y que sabe sobreponerse a los desastres. Tenemos un país muy rico en muchas cosas, pero lo más valioso es su gente y eso ha quedado comprobado una vez más. Ojalá que esta ayuda y esta solidaridad que vemos no sean sólo cuando la naturaleza nos golpea como lo acaba de hacer.

#FuerzaMéxico

Esta lucha no ha terminado.

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