Justo ayer comentamos que Rubén Omar Romano no era culpable de la crisis rojinegra, pero como la directiva no sabe asumir su responsabilidad en un equipo que se cae a pedazos, decidieron correr al entrenador como si esa fuera la solución. Las cosas no se van a componer en el Atlas, porque no hay ni pies ni cabeza. Los Zorros están donde merecen estar, en el último lugar, porque son víctimas de las malas decisiones y de las pésimas planeaciones.

Lo peor de todo es que las televisoras se creen expertas en futbol y ahí están las consecuencias, ahí está su realidad. Lo que le pasa al Atlas es algo realmente grave, porque sólo tiene ocho puntos de ventaja sobre el Veracruz, cuando aún faltan 15 puntos por disputarse. Los Tiburones sabían la importancia de este partido contra los rojinegros y eso les permite tener otra veladora encendida.

Por si fuera poco, cuando se reanude la actividad de la Liga, tras la fecha FIFA, el Atlas recibirá al líder Santos en la jornada 13 y los Lobos al sublíder Toluca. Se puede decir que el Veracruz la tendrá más fácil en la próxima fecha, porque jugará en casa contra Xolos, que después recibirá al Atlas en la fecha 14, mientras que Lobos irá al Azul y el Veracruz visitará a Chivas. Es decir, el drama va a continuar y la lucha por la permanencia promete más polémica, sudor y lágrimas.

También comentaba que daba la impresión de que al Atlas lo querían descender y creo que lo dicho no es ninguna locura. Normalmente, cuando un equipo va a pique, lo primero que se busca es un técnico con experiencia. Ahí está el caso del Puebla, se fue el Chiquis García, llegó Enrique Meza y el equipo está salvado, en zona de Liguilla.

El Atlas decidió dejar a Gerardo Espinoza por lo que resta del torneo. No tiene la experiencia necesaria como técnico para asumir un compromiso tan difícil. ¿Cómo hacer ganar a un equipo que ya sale derrotado al campo de juego? Tal vez pensando que si Roberto Hernández pudo en su momento con el Morelia, cuando nadie lo quería salvar, tal vez ahora pase lo mismo con Gerardo. La verdad es que lo del técnico michoacano ha sido espectacular. Sinceramente, no creo que pase lo mismo ahora con los tapatíos, que tienen toda la presión encima. Las nueve derrotas hablan por sí solas. No fuera último el Cruz Azul, porque en la televisora del Ajusco ya estarían criticando a Billy.

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