Con la tecnología de Google Traductor

Mira

Salud y deporte
titulo-foto

Carolina Gómez Vinales

16, octubre 2019 - 1:48

Salud y deporte

Equidad de género en el futbol

La semana pasada, en un hecho sin precedentes, Irán permitió a las mujeres entrar a un estadio de futbol. Tras casi cuatro décadas de restricción, las iraníes pudieron presenciar un partido de su selección nacional pues una ley islámica establecida en 1981 les prohibía hacerlo hasta hace poco. Las estrictas leyes de Irán prohíben que las mujeres asistan a eventos deportivos, pero la presión internacional permitió una flexibilización de las normas y aunque solo les permitieron la entrada a 4 mil de ellas, en un estadio en el que entran ochenta mil espectadores, fue un avance para la equidad de género.

Las mujeres iraníes pueden conducir automóviles, ir a la universidad y vivir una vida casi normal en el recinto de una casa cerrada. En la vida pública, la separación de sexos es evidente.

En marzo de este año, una joven, identificada como la “chica azul”, por el color del uniforme de su equipo, fue arrestada cuando trataba de acceder a un estadio de futbol por violar el estricto código de vestimenta para mujeres en Irán. Después de tres días fue liberada bajo fianza y esperó seis meses a que se juzgara su caso. Para cuando iba a celebrarse la audiencia judicial, se enteró que sería condenada a prisión, así que decidió prenderse fuego frente al tribunal y murió después.

Posterior a ese incidente, algunos proclamaron un gran avance el haber permitido el acceso a este grupo reducido de mujeres que ocuparon un sector reducido en las gradas del estadio. Yo lo considero un momento histórico en la lucha por avanzar en la equidad en un país con severas leyes y estrictos castigos hacia la población femenina.

El mes pasado, la FIFA solicitó, al parecer enérgicamente, a Irán permitir el acceso de mujeres a los estadios sin restricciones. No ocurrió así exactamente, pero la Federación se mostró satisfecha y lo calificó como un paso adelante muy positivo. Considero que así fue: un sueño alcanzado por muchas jóvenes que entusiastas vieron golear a su equipo 14-0 contra la selección de Camboya. El deporte tiene mucho potencial para contribuir de manera social, política y económica al empoderamiento de las mujeres y las niñas.