Josué Padilla Márquez

FOTO: Reuters

La tensión que se vive a nivel mundial por los problemas de Rusia y Ucrania, se ha trasladado hasta las canchas de futbol en todas partes. Este sábado, el duelo entre Everton y Manchester City dejó una imagen muy emotiva con los jugadores Vitaly Mykolenko y Oleksandr Zinchenko.

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Los dos futbolistas ucranianos se fundieron en un abrazo durante el calentamiento de sus escuadras, en lo que fue un juego lleno de emociones para ambos.

Una vez salieron al terreno de juego, el Goodison Park, cancha del Everton, hizo un llamado a la paz con varias pancartas, mientras que los jugadores salieron con chamarras que dicen “no war”, buscando que puedan cambiar el pensamiento de las personas y sensibilizando a los altos mandos para que detengan el movimiento militar que se vive en el país ucraniano.

“He ain’t heavy, he’s my brother”, sonaba en el estadio mientras las cámaras se iban con Vitaly Mykolenko y Oleksandr Zinchenko, que mostraron un rostro triste y preocupado, además de que el emotivo momento dejó al capitán de Ucrania llorando.

Tras el gesto realizado por la gente del Everton, el duelo comenzó y se convirtió en una batalla dentro del terreno de juego, donde ambos equipos se aferraron a llevarse los tres puntos.

Fueron muy pocas oportunidades para ambos equipos y el juego se definió gracias a un error en la defensa de los toffees.

Jack Grealish recibió un balón cerca del borde del área, este mandó un centro raso que la defensa no supo cortar adecuadamente y el balón le quedó a Phill Foden para que solo empujara el balón ante la desesperación de Jordan Pickford, que había sido pieza clave.

El gol cayó en el minuto 82 y así fue como se decidió un juego marcado por un bonito mensaje al mundo, buscando la paz.

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